14/06/2021, 14.51
VATICANO
Enviar a un amigo

Papa: la pobreza no es fruto del destino, es consecuencia del egoísmo

En el mensaje para la V Jornada Mundial de los Pobres, Francisco subraya la necesidad de "compartir" con los pobres, de la que deriva el principio de que "es decisivo dar vida a procesos de desarrollo en los que se valoren las capacidades de todos". "Si se margina a los pobres como si fueran culpables de su condición, entonces el concepto mismo de democracia se pone en crisis y toda política social se convierte en un fracaso".

 

Ciudad del Vaticano (AsiaNews) - Los pobres son "el sacramento de Cristo, representan su persona y remiten a él" y la pobreza "no es fruto del destino sino consecuencia del egoísmo". De estas dos afirmaciones, fundadas en el Evangelio, el Papa Francisco deduce una serie de consecuencias, en primer lugar el "compartir" con los pobres, del que deriva el principio de que "es fundamental dar vida a los procesos de desarrollo en los que se valoren las capacidades de todos”, y a una “planificación creativa, que permita incrementar la libertad efectiva para poder realizar la existencia con las capacidades propias de cada persona”. En definitiva, se requiere un enfoque diferente de la pobreza, porque “si se margina a los pobres, como si fueran culpables de su condición, entonces el concepto mismo de democracia se pone en crisis y toda política social se convierte en un fracaso”.

Estos son los puntos centrales del mensaje de Francisco para la V Jornada Mundial de los Pobres - el 33o domingo del tiempo ordinario, que este año cae el 14 de noviembre-  que hoy se dio a conocer y desarrolla el tema "Siempre tendréis pobres con vosotros" (Mc 14: 7).

Toda la obra de Jesús, dice el Papa, "afirma que la pobreza no es fruto de la fatalidad, sino signo un concreto de su presencia entre nosotros". Los pobres, entonces, "son verdaderos evangelizadores porque fueron los primeros en ser evangelizados y llamados a compartir la bienaventuranza del Señor y su Reino".

En la reflexión del Papa es fundamental la afirmación de que “Jesús no sólo está de parte de los pobres, sino que comparte con ellos la misma suerte. Esta es una importante lección también para sus discípulos de todos los tiempos”. Los pobres, de hecho, "no son personas “externas” a la comunidad, sino hermanos y hermanas con los cuales compartir el sufrimiento para aliviar su malestar y marginación, para que recuperen la dignidad perdida y se les asegure la necesaria inclusión social. Por otra parte, sabemos que una obra de beneficencia presupone un benefactor y un beneficiado, mientras que el compartir genera fraternidad. La limosna es ocasional, mientras que el compartir es duradero”. Es una actitud que requiere conversión, y en primer lugar consiste en "abrir nuestro corazón para reconocer las múltiples expresiones de la pobreza y en manifestar el Reino de Dios mediante un estilo de vida acorde con la fe que profesamos. A menudo, los pobres son vistos como personas separadas, como una categoría que requiere un servicio caritativo particular. En este sentido, seguir a Jesús implica un cambio de mentalidad, es decir, aceptar el desafío del compartir y participar”.

El Evangelio, entonces, “nos pide reconocer las múltiples y demasiadas formas de desorden moral y social que generan siempre nuevas formas de pobreza. Parece que se está imponiendo la idea de que los pobres no sólo son responsables de su condición, sino que constituyen una carga intolerable para un sistema económico que pone en el centro los intereses de algunas categorías privilegiadas. Un mercado que ignora o selecciona los principios éticos crea condiciones inhumanas que se abaten sobre las personas que ya viven en condiciones precarias. Se asiste así a la creación de trampas siempre nuevas de indigencia y exclusión, producidas por actores económicos y financieros sin escrúpulos, carentes de sentido humanitario y de responsabilidad social”. A esto se suma la pandemia que, además de sufrimiento y muerte, ha traído nuevas formas de pobreza y también de desocupación “que afecta de manera dramática a muchos padres, mujeres y jóvenes. La solidaridad social y la generosidad de la que muchas personas, gracias a Dios, son capaces, unidas a proyectos de promoción humana a largo plazo, están aportando y aportarán una contribución muy importante en estas circunstancias”.

Y como "la pobreza no es fruto del destino", sino "consecuencia del egoísmo", es "crucial dar vida a procesos de desarrollo en los que se valoren las competencias de todos, para que la complementariedad de competencias y la diversidad de funciones den lugar a un recurso común de participación. Hay muchas pobrezas de los 'ricos' que se podrían curar con la riqueza de los 'pobres', ¡si solo se encontraran y se conocieran! Nadie es tan pobre que no pueda dar algo de sí mismo en la reciprocidad. Los pobres no pueden ser solo los que reciben; hay que ponerlos en condiciones de poder dar, porque saben bien cómo corresponder”.

Por último, como señaló Mons. Rino Fisichella, presidente del Pontificio Consejo para la Promoción de la Nueva Evangelización en la presentación del Mensaje, es muy importante la referencia a la condición de la mujer. En el documento, inspirándose en las palabras de Jesús a los discípulos, cuando comenta el gesto de la mujer que había derramado un perfume muy valioso sobre su cabeza, Francisco observa que "esta mujer anónima, destinada quizás por eso a representar a todo el universo femenino que a lo largo de los siglos no tendrá voz y sufrirá violencia, inaugura la significativa presencia de las mujeres que participan en el momento culminante de la vida de Cristo: su crucifixión, muerte y sepultura y su aparición como Resucitado" . (FP)

 

TAGs
Enviar a un amigo
Vista para imprimir
CLOSE X
Ver también
Papa a las víctimas del terremoto: “Apenas sea posible también yo espero ir a visitarlos”
28/08/2016 13:40
Bartolomé: un rol fundamental de las religiones per crear comunión entre los pueblos
05/12/2016 17:00
​Obispo de Bangalore: En Navidad compartamos la alegría de Dios con aquellos que nos hacen el mal
23/12/2015
Papa: La Eucaristía sana nuestra memoria y crea cadenas de solidaridad
14/06/2020 12:41
Papa: Para el cristiano, ‘no es lícito’ delegar la responsabilidad de compartir con los pobres
13/06/2020 12:33


Newsletter

Suscríbase a la newsletter de Asia News o cambie sus preferencias

Regístrese
“L’Asia: ecco il nostro comune compito per il terzo millennio!” - Giovanni Paolo II, da “Alzatevi, andiamo”