Papa: en América Latina un gran potencial, valores cristianos y graves problemas económicos y sociales
Ciudad del Vaticano (AsiaNews) – La “gran potencialidad humana y espiritual” de América Latina, donde los valores cristianos están "profundamente arraigados" y donde hay "graves problemas sociales y económicos" fueron evocados por el Papa Francisco que antes del Ángelus, recordó el viaje realizado en Ecuador, Bolivia y Paraguay, reafirmando el compromiso de la Iglesia "para movilizar la fuerza espiritual y moral de sus comunidades, trabajando con todos los componentes saludables de la sociedad".
A las 30.000 personas presentes en la Plaza de San Pedro - "sois valientes, con este calor", les ha dicho el Papa - Francisco comentó el Evangelio de hoy que "nos dice que los Apóstoles, después de la experiencia de la misión, regresaron contentos pero también cansados. Y Jesús, lleno de comprensión, quiere darles un poco de consolación; y entonces los conduce a otro lado, en un lugar apartado para que puedan descansar un poco (Cfr. Mc 6,31). «Muchos entre la gente, los vieron partir y entendieron… y se adelantaron» (v. 32). A este punto el evangelista nos presenta una imagen de Jesús de singular intensidad, “fotografiando”, por así decir, sus ojos y captando los sentimientos de su corazón, y dice así el evangelista: «Bajando de la barca, vio una gran multitud, tuvo compasión de ellos, porque eran como ovejas sin pastor, y se puso a enseñarles muchas cosas» (v. 34). Retomemos los tres verbos de este sugestivo fotograma: ver, tener compasión, enseñar. Los podemos llamar los verbos del Pastor. Ver, tener compasión, enseñar. El primero y el segundo, ver y tener compasión, están siempre asociados a la actitud de Jesús: de hecho su mirada no es la mirada de un sociólogo o de un reportero gráfico, porque Él mira siempre con “los ojos del corazón”. Estos dos verbos, ver y tener compasión, configuran a Jesús como Buen Pastor. También su compasión, no es solamente un sentimiento humano, sino es la conmoción del Mesías en la cual se ha hecho carne la ternura de Dios. Y de esta compasión nace el deseo de Jesús de nutrir a la gente con el pan de su Palabra, es decir, de enseñar la palabra de Dios a la gente. Jesús ve, Jesús tiene compasión, Jesús enseña. ¡Esto es hermoso!".
"Y yo he pedido al Señor que el Espíritu de Jesús, Buen Pastor, este Espíritu, me guiara durante el Viaje apostólico que he realizado en los días pasados a América Latina y que me ha permitido visitar Ecuador, Bolivia y Paraguay. Agradezco a Dios con todo el corazón por este don. Agradezco a los pueblos de los tres países, por su afectuosa y calurosa acogida y entusiasmo. Renuevo mi reconocimiento a las Autoridades de estos Países por su acogida y colaboración. Con gran afecto agradezco a mis hermanos Obispos, a los sacerdotes, a las personas consagradas y a toda la población por el calor con el cual han participado. Con estos hermanos y hermanas he alabado al Señor por las maravillas que ha obrado en el Pueblo de Dios en camino, en camino en estas tierras, por la fe que ha animado y anima sus vidas y su cultura. Y también lo hemos alabado por las bellezas naturales con las cuales ha enriquecido estos Países. El Continente Latinoamericano tiene grandes potencialidades humanas y espirituales, conserva valores cristianos profundamente enraizados, pero también vive graves problemas sociales y económicos. Para contribuir a la solución, la Iglesia está comprometida a movilizar las fuerzas espirituales y morales de sus comunidades, colaborando con todos los componentes de la sociedad”-
“Ante los grandes desafíos que el anuncio del Evangelio debe afrontar, he invitado a recibir de Cristo Señor la gracia que salva y que da fuerza al empeño del testimonio cristiano, a desarrollar la difusión de la Palabra de Dios, para que la sólida religiosidad de aquellas poblaciones pueda siempre ser testimonio fiel del Evangelio. A la materna intersección de la Virgen María, que toda Latinoamérica venera con el título de Nuestra Señora de Guadalupe, encomiendo los frutos de este inolvidable viaje apostólico".