Papa: "agradecimiento profundo" por la fidelidad de la Iglesia Ucraniana que recuerda su martirio
Mensaje de Francisco en el aniversario del pseudo-sínodo de Lviv, con el cual Stalin hizo "retornar" a los católicos al Patriarcado de Moscú. Gratitud por aquellos que "incluso a costa de tribulaciones e incluso el martirio, en el transcurso del tiempo han sido testimonios de fe". "Solidaridad a los pastores y a los fieles por cuanto hacen en este momento difícil, marcado por las dificultades de la guerra, para aliviar el sufrimiento de la población y para buscar caminos de paz para la tierra de la querida Ucrania".
Ciudad del Vaticano (AsiaNews) - "Profundo agradecimiento" por la "inquebrantable fidelidad" de la Iglesia griego católico ucraniana al Papado es expresado por Francisco en el mensaje que envió a Su Beatitud Sviatoslav Shevchuk, arzobispo mayor de Kiev- Halyč, en el aniversario de los "eventos tristes” de marzo de 1946.
La referencia es al denominado Sínodo de Lviv (o Leopoli), por el cual se decidió "el retorno" de los fieles, las iglesias y todos los bienes de los greco-católicos al Patriarcado ortodoxo de Moscú. Un hecho querido por Stalin, que veía en la Iglesia católica un enemigo del comunismo, materializado en un "sínodo" en el que no hubo obispos católicos - todos encarcelados por un año por el NKVD, más tarde llamada la KGB - ni otros líderes de la Iglesia, sino sólo unos pocos sacerdotes. El "retorno" fue acompañado y seguido de una persecución violenta, con muchos sacerdotes y fieles muertos.
"La Iglesia Greco-Católica Ucraniana - escribe el Papa - en estos días conmemoran los tristes acontecimientos de marzo de 1946. “Hace setenta años, el contexto ideológico y político, así como las ideas contrarias a la existencia misma de vuestra Iglesia, llevaron a la organización de un pseudo-sínodo en Lviv, provocando en los pastores y en los fieles decenios de sufrimiento. Ante la memoria de estos eventos, inclinamos la cabeza con profunda gratitud frente a aquellos que, también con el precio de tribulaciones e incluso del martirio, durante este tiempo han testimoniado la fe, vivida con devoción en la propia Iglesia y en unión indefectible con el sucesor de Pedro”. “Al mismo tiempo –prosigue Francisco– con ojos iluminados por la misma fe, miramos al Señor Jesucristo, poniendo en Él, y no en la justicia humana, toda nuestra esperanza. “Él es la fuente verdadera de nuestra confianza para el presente y el futuro, estando seguros de ser llamados a anunciar el Evangelio también en medio de cualquier sufrimiento o dificultad. ‘¿Y quién os podrá hacer daño, si vosotros seguís el bien? ¡Y si debéis sufrir por la justicia, bendecidos vosotros! (...) Adorad al Señor, Cristo, en vuestros corazones, siempre dispuesto a responder a todo el que os pida razón de la esperanza que hay en vosotros. Sin embargo, hacerlo con gentileza y respeto ... "(1 Pe 3,13-15)".
"Haciendo mías las palabras del apóstol Pedro - dice el informe - expreso mi profundo agradecimiento por su lealtad y los animo a hacerse incansables testigos de esta esperanza que hace más luminosa nuestra existencia y la de todos los hermanos y hermanas a nuestro alrededor. También renuevo mi solidaridad con los pastores y fieles por cuanto ha hecho en estos momentos difíciles, marcados por las dificultades de la guerra, para aliviar el sufrimiento de la población y de buscar los caminos de la paz para la tierra dela querida Ucrania".
"En el Señor son nuestro valor y nuestra alegría. A Él me dirijo, a través de la intercesión de la beata Virgen María y de los mártires de vuestra Iglesia, para que el consuelo divino ilumine los rostros de vuestras comunidades en Ucrania y en otras partes del mundo. Al mismo tiempo, os imparto a vosotros, a los obispos, sacerdotes, religiosos y fieles de la Iglesia greco-católica de Ucrania, una especial bendición apostólica como prenda de mi constante afecto y el recuerdo".
14/05/2019 12:08
08/08/2018 11:36
11/06/2019 12:11
02/06/2018 12:54