Papa: "Cercanía" de la Iglesia"a los hermanos y hermanas de Siria e Irak"

Recibiendo a los participantes de la asamblea de la ROACO, Francisco habla de "aquella paz que es segura solo sí es cultivada por más manos". "Los primeros llamados a cultivar la paz son justamente los hermanos y hermanas de Oriente, con sus Pastores. Esperando a veces contra toda esperanza, permaneciendo allá donde nacieron y donde desde los inicios resonó el Evangelio del Hijo de Dios hecho hombre".

Ciudad del Vaticano (AsiaNews)- La "cercanía" de la Iglesias para con los "hermanos y hermanas de Siria e Irak y también a los de la "amada Ucrania, en la hora tan grave que está viviendo" fue expresada hoy por el Papa Francisco recibiendo a los participantes en la asamblea de la "Reunión de las Obras para la ayuda a las Iglesias Orientales" (R.O.A.C.O.)

El Papa, recordando su peregrinación a Tierra Santa y el olivo plantado en los Jardines vaticanos junto al Patriarca De Constantinópolis y los Presidentes israelí y palestino, evocó "aquella paz que es segura si sólo se la cultiva por más manos. Quien se compromete en cultivar- agregó- no debe olvidar que el crecimiento depende del verdadero Agricultor que es Dios. Por el resto, la verdadera paz, aquella que el mundo no puede darnos la dona Jesucristo. Por esto, no obstante las graves heridas que lamentablemente sufren todavía hoy, estas pueden resurgir siempre.

"Los primeros llamados a cultivar la paz-dijo aún- son justamente los hermanos y las hermanas de Oriente, con sus Pastores. Esperando a veces contra toda esperanza, permaneciendo allá donde nacieron y donde desde los inicios resonó el Evangelio del Hijo de dios hecho hombre, puedan experimentar que "son beatos los operadores de paz, porque serán llamados hijos de Dios" (Mt. 5,8). Y puedan siempre tener el apoyo de la Iglesia universal, para conservar la certeza que el fuego de Pentecostés, la potencia del Amor, puede frenar el fuego de las armas, del odio y de la venganza. Sus lágrimas y sus miedos son las nuestras, ¡como del resto la esperanza de ellos! Lo demostrará nuestra solidaridad, si logrará ser concreta y eficaz, capaz de estimular a la comunidad internacional en defensa de los derechos de los individuos y de los pueblos. En particular a los hermanos de Siria e Irak, a sus obispos y sacerdotes, expreso junto con ustedes la cercanía de la Iglesia Católica. Y la extiendo a Tierra Santa y al Cercano Oriente, pero también a la amada Ucrania, en la hora tan grave que está viviendo, y a Rumania, a las cuales se interesaron en vuestros trabajos".

Los exhorto a continuar el compromiso hecho en favor de ellos. El socorro de ustedes a las naciones más golpeadas, puede responder a las necesidades primarias, especialmente de los más pequeños y débiles, como también a los jóvenes tentados de abandonar sus patrias de origen. Y siendo que las comunidades orientales están presentes en todo el mundo, ustedes tratan de llevar alivio y seguridad, con el debido respeto para la identidad de ellos y para la libertad religiosa".