Panvel, un simposio de la Iglesia siro-malabar por la dignidad humana y la cultura de la vida
Tres días de eventos sobre temas éticos cruciales. Comenzó el 30 de noviembre y se concluirá mañana. Participan 200 delegados de 22 diócesis, tanto laicos como religiosos. Experto de la Academia Pontifica por la vida: no es necesario mantener a la persona con vida a toda costa, pero tampoco poner fin a su vida. Encomendar el paciente a Dios, acompañándolo con amor.
Panvel (AsiaNews) – Líderes religiosos, estudiosos, doctores y legisladores de toda la India se reunieron en los últimos días en defensa de la vida. El “EVA – Simposio sobre la vida” del 2017 es organizado por la eparquía de Kaylan, con el apoyo de la comisión sinodal siro-malabar para la familia, laicidad y vida. El evento dura tres días, y se concluirá mañana, 2 de diciembre.
Mons. Sebastian Vaniyapurackal, nuevo obispo de la Iglesia siro-malabar, inauguró el simposio con la presencia de Mons. Thomas Elavanal, obispo de Kalyan. En la iniciativa participan 200 delegados, que comprenden obispos, figuras religiosas y laicas provenientes de 22 diócesis católicas de la India y del exterior.
Los organizadores del simposio sostienen que “la sociedad en que vivimos” afronta crecientes y nuevas amenazas a la dignidad de la vida, y de los individuos y familias, “especialmente cuando la vida es frágil e indefensa”. Ellos afirman que han recibido las recomendaciones de la cuarta asamblea arquiepiscopal siro-malabar, que insta a las diócesis y a las eparquías a “inventar modos más concretos para promover la vida y proteger el matrimonio”.
Durante el simposio, el Dr. Pascoal Carvalho, miembro corresponsal de la Pontifica Academia por la Vida, presentó un análisis titulado: “Las preocupaciones éticas y las cuestión del final de la vida”. Recordando el mensaje dirigido a la Academia por el Papa Francisco hace pocas semanas, el experto afronta varias cuestiones médicas y éticas: en ensañamiento terapéutico, que es definido como el “exceso de celo” en algunos tratamientos que demuestran ser ineficaces; la muerte, que no debe ser confundida con el coma, durante el cual el paciente aún puede mostrar funciones vitales y actividad cerebral; y el concepto de sufrimiento como bien invalorable. Para la Iglesia católica, el dolor halla “su verdadero significado en Jesucristo”, que a través de sus padecimientos ha redimido al hombre.
Como conclusión, el Dr. Carvalho reafirma que “la posición de la Iglesia católica no es mantener a la persona con vida a cualquier costa... pero tampoco poner fin a su vida porque hay sufrimiento y dolor”. De alguna manera, “cuando llega el momento” es necesario aceptar “los propios límites y encomendar la persona a Dios”, acompañándola con “amor” y [brindándole] tratamientos que limiten su sufrimiento. (NC)