Ortodoxos de luto: murieron el patriarca de Serbia y el metropolitano de Kazán

de Vladimir Rozanskij

Irinej de Serbia y Feofan de Kazan murieron de Covid-19. Ambos eran muy amados, no solo por los ortodoxos, sino por todo el pueblo y por fieles de otras religiones. También fallecieron el padre espiritual Feodor Pestretsov, de la diócesis de Nizhny Novgorod, y el armenio Sepukh Chuldzhan, cabeza de la diócesis de Gugarsk.

Moscú (AsiaNews) - Ayer, 20 de noviembre, a las 7 de la mañana, falleció en Belgrado el patriarca serbio Irinej (Gavrilović, foto 1) a la edad de 90 años. Se encontraba en el hospital desde el 5 de noviembre por coronavirus. Irinej era una figura muy querida no solo en Serbia, sino también en Rusia y en todo el mundo ortodoxo, dentro del catolicismo y en otras denominaciones cristianas. El presidente de Serbia, Aleksandr Vucic, lo recordó con estas palabras: “Fue un honor para mí conocerlo. Las personas como usted nunca se irán”. El presidente de Bosnia-Herzegovina, Milorad Dodik, también se sumó a las condolencias, recordando al "gran pastor" de los ortodoxos balcánicos: "Estaremos eternamente agradecidos por todo el amor, la atención y la bendición que nosotros, como pueblo y como república, hemos recibido del Patriarca Irinej”.

Ese mismo día, la desaparición del amado patriarca de Serbia fue acompañada en Rusia por otra pérdida importante debido al Covid-19. Falleció el metropolitano de Kazan, Feofan (Ašurkov, foto 2), muy venerado en la República de Tartaristán - una región de mayoría tártara musulmana - y en toda Rusia. Feofan, de 74 años, fue el pastor de los ortodoxos de Kazán durante 5 años, después de un largo servicio en Siberia. En la década de 1980 estuvo un tiempo en Jerusalén, después fue secretario del exarcado ortodoxo ruso para América Central y del Sur, representante del patriarcado de Moscú en África, y finalmente en el patriarcado de Antioquía, en Siria. Llegó a ser una de las personalidades más conocidas del mundo ortodoxo.

En los cinco años que pasó en la república tártara, Feofan había conquistado el afecto de todos, no solo de los fieles ortodoxos. El mismo presidente de Tatarstán, Rustam Minnikhanov, subrayó: "En los pocos años que estuvo con nosotros, el obispo Feofan se hizo muy familiar y cercano a muchos habitantes de nuestra región, ganándose la autoridad y el respeto de representantes de diversas nacionalidades y religiones. También se hizo amigo de toda la Umma musulmana de nuestra república y de nuestro mufti”, recordó Minnikhanov. El cuerpo del metropolitano será enterrado en la Catedral de Nuestra Señora de Kazán, en la colina de la capital junto a la gran mezquita azul, el principal centro islámico de toda Rusia. Feofan era uno de los jerarcas ortodoxos más cercanos al patriarca de Moscú Kirill (Gundjaev).

También en Rusia, otro sacerdote muy querido por el pueblo falleció el 18 de noviembre debido al coronavirus, el protoierej Feodor Pestretsov, de 75 años, de la diócesis de Nizhny Novgorod (foto 3), padre espiritual de los sacerdotes de varias instituciones diocesanas. La Iglesia armenia también está de luto en estos días. El 19 de noviembre, falleció el arzobispo Sepukh Chuldzhan, de 61 años, responsable de la diócesis de Gugarsk (foto 4). Originario de la ciudad turca de Malatia, en su infancia se trasladó con su familia a Armenia y conducía su diócesis desde 1996.