"Occupy Central" elige un nuevo líder: el reverendo Chu Yiu-ming

Activista por los derechos humanos desde hace tiempo, el pastor bautista es conocido por la ayuda dada a los manifestantes escapados luego de la masacre de Tiananmen. Su nombre elegido por el movimiento pues es garantía de contacto con todas las personas del grupo, que desea una verdadera democracia para el territorio antes de 2017.

Hong Kong (AsiaNews)- El movimiento "Occupy Central"- nacido con el fin de hacer presión al gobierno de Hong Kong a través de protestas pacíficas y así obtener la democracia en el territorio- está por nombrar al pastor protestante Chu Yiu-ming como su propio líder. En las próximas dos semanas el grupo, que cuenta con decenas de miles de sostenedores, decidió además crear una task force para organizar nuevas manifestaciones con el objetivo de obtener el sufragio universal en la ex colonia británica.

La elección de nombrar al reverendo Chu fue revelada por el propio interesado. Los otros dos mayores organizadores del grupo (Benny Tai Yiu-ting y el doctor Chan Kin-man) le pidieron que "asuma esta responsabilidad". El otro candidato fuerte era el presidente del Partido laborista, Lee Cheuk-yan: según el rev. Chu: "fui elegido porque tengo más contactos con grupos diversos de activistas y una cierta experiencia en el organizar campañas sociales en larga escala".

El ministro bautista es un activista por los derechos humanos famoso ya sea en Hong Kong que en China continental. Es conocido por haber ayudado a diversos manifestantes escapados luego del estrago de la plaza Tienanmen del 4 de junio de 1989. Su nombramiento llega luego de una gran encuesta conducido propiamente por el "Occupy Central", a la cual han participado unos 62 mil personas: según los datos recogidos, el 94 % de los entrevistados pide al gobierno "mayor participación popular" para las próximas elecciones donde se elegirán al jefe del ejecutivo previstas para el 2017. Además, el 91% votó contra el "filtro" propuesto por Beijing para bloquear a los candidatos incómodos.

La Iglesia católica apoya estas iniciativas desde hace años. Con un llamado "urgente al gobierno y a todas las partes en causa", en julio de 2013, la diócesis del territorio invitó a los representantes del ejecutivo a no retrasar el debate sobre la introducción del sistema "un hombre, un voto". Esto "debe entrar en vigor para las elecciones del nuevo Jefe del ejecutivo", previstas para el 2017. De otro modo, a la luz de la doctrina social de la Iglesia y de la Declaración universal de los derechos del hombre, "la población podrá iniciar acciones de desobediencia civil pacíficas y no violentas".