Obispos filipinos condenan la matanza de Maguindanao: Se necesita un verdadero plan de paz
Manila (AsiaNews/Cbcp)- Los vértices de la Conferencia episcopal filipina condenan "el acto de violencia contra la vida humana" que ha causado la muerte de al menos 43 policías. Asesinados por las milicias de los rebeldes del Milf (Moro Islamic Liberation Front) y el Biff (Bangsamoro Islamic Freedom Fighters). El enfrentamiento a fuego sucedió el pasado 25 de enero en Mamasapano, en la provincia de Maguidanao, situada en la Región Autónoma del Mindanao Musulmán, en el sur de Filipinas. Los policías irrumpieron en un pueblo, buscando a dos sospechosos extremistas islámicos: sin embrago, ellos no habían pedido la autorización a las milicias del Milf, que controlan la zona como lo prevé el acuerdo de paz. Por eso la respuesta de lo milicianos fue así, y llevó a la emboscada y a las decenas de muertos.
En una nota oficial los obispos filipinos confirman su firme apoyo y decidido a la paz y a los coloquios en curso entre el gobierno y las milicias rebeldes. El presidente de la Cbcp, Sócrates B. Villegas advierte que la Iglesia "no puede ciertamente alienarse con aquellos que piden la interrupción de los coloquios de paz".
El prelado, obispo de Lingyen-Dagupan, agrega que "el triste suceso" de estos días "muestra la necesidad y la urgencia de una solución que no sea apresurada, pero sí inclusiva, basada en los principios justos para todos". La Cbcp "llora con las familias de los policías", por su desaparición, "víctimas de un acto de violencia sin sentido en Mindanao", una tierra por otro lado "ya cansada de batallas y conflictos".
Las víctimas pertenecen a los cuerpos especiales (Saf) de la policía nacional filipina (Pnp) y estaban buscando a dos presuntos terroristas islámicos de primer plano: Zulkifli bin Hir, más conocido como Marwan, perteneciente a la Jemaah Islamiyah (Ji) y a Basit Usman, experto en explosivos. Ayer por toda la jornada la bandera de Filipinas estaban a media asta en el cuartel general de la policía en Manila.
Comentando el incidente el Ministro filipino del Interior, Manuel Roxas advierte que la cuestión "podría influir" en los coloquios de paz, "pero tenemos esperanza y confianza" en que el trabajo de años no vaya perdido. Mohagher Iqbal, jefe del comité de paz de los grupos rebeldes, afirma que la policía "entró en la zona y nos ha atacado", por lo tanto se trata de un episodio de "legítima defensa". Sin embargo, agregó, que el ese solo episodio de violencia no hará derrumbar los esfuerzos que se han hecho por la paz, porque ambos frentes están comprometidos en alcanzar el objetivo común. Ghazali Jaafar, vice jefe de los rebeldes, agrega que el tratado de paz firmado en marzo pasado "es la única solución posible del conflicto".
01/09/2021 15:28
