Obispos de Sri Lanka: se debe hacer una investigación independiente sobre las masacres de Pascua

Se resalta la ineficiencia del gobierno. “Pareciera que las autoridades solo quieren identificar las fallas en el sistema de seguridad”. Los obispos reafirman que el principal objetivo debe ser identificar a los autores, facilitadores y cómplices.

Colombo (AsiaNews/Agencias) – En un potente llamamiento que reclama justicia y llegar a la verdad de los sucedido, la Conferencia Episcopal de Sri Lanka (CBCSL) pide que se ponga en marcha una investigación “independiente e imparcial” sobre las masacres de Pascua. A casi cuatro meses de los atentados ocurridos en tres iglesias y tres hoteles de Colombo, que sacudieron la isla situada en el Golfo de Bengala, por primera vez, todos los obispos católicos del país piden a una sola voz que el gobierno haga justicia en las masacres que provocaron la muerte de 263 personas y culminaron con más de 600 heridos, dejando secuelas físicas y espirituales en los sobrevivientes y en toda la comunidad cristiana.

Los líderes de la Iglesia -que ya habían manifestado anteriormente críticas con respecto al curso de las investigaciones- volvieron a protestar por la ineficiencia mostrada por el gobierno. Entre los 14 firmantes, figura el Card. Malcolm Ranjith, arzobispo de Colombo, quien pocas horas después de la masacre arremetió contra el gobierno de la isla por las carencias de la administración. Luego denunció abiertamente la connivencia de la política con el terrorismo internacional y los países occidentales que lo patrocinan.

En la carta de denuncia, los obispos remarcan: “Si bien cabe apreciar los esfuerzos que ha hecho el gobierno para recuperarse, deseamos repetir que lo más importante es hacer justicia, y que los responsables rindan cuentas ante la ley rápidamente”. Luego, agregan: “En este esfuerzo, deben evitarse todas las consideraciones respecto a etnia, religión u otros factores”.

Las masacres del 21 de abril de 2019, destacan los obispos, “todavía provocan miedo e incertidumbre en la mente de la población”. En efecto, los atentados tomaron por sorpresa a los fieles reunidos para celebrar la resurrección del Señor, totalmente desprevenidos del peligro inminente. Luego salió a la luz que los servicios de seguridad indios habían dado cuando menos cuatro alertas sobre la posibilidad de un atentado, y que éstas fueron ignoradas por las autoridades de Colombo. Recientemente, el mismo primer ministro Ranil Wickremesinghe reconoció la ineficiencia del aparato de inteligencia, pero cargó la culpa a dos altos funcionarios que ya han sido arrestados.

Los máximos representantes de la Iglesia católica de Sri Lanka remarcan que se sienten “profundamente doloridos al notar que aún no se ha emprendido una investigación justa, equitativa e imparcial. Notamos que se han creado varias comisiones y que su principal objetivo parece ser señalar a los responsables de las graves fallas en la seguridad”. “Si bien esta tarea es útil -afirman, en conclusión- queremos repetir que por una cuestión de justicia, el objetivo final de las investigaciones debe ser averiguar quiénes son los autores, quién los ayudó y quiénes son los cómplices de este acto infame. Es lamentable que no haya ninguna señal positiva en esta dirección”.