Obispos de Asia: 'Estamos al borde del holocausto nuclear, deténgase'

El llamamiento del cardenal Charles Bo al presidente ruso Putin en nombre de la Federación de Conferencias Episcopales de Asia: "Detenga los ataques a Ucrania y vuelva a la ONU para hallar una solución pacífica". "El único camino para el futuro de la humanidad es la paz".

Bangkok (AsiaNews) - Justo cuando la pandemia reclama un esfuerzo conjunto "de curación global”, el mundo se encuentra en el umbral de la autodestrucción: "todo esto debe terminar". Esto es lo que escribe el arzobispo de Rangún, el cardenal Charles Bo, en un llamamiento desde su rol de presidente de la Federación de Conferencias Episcopales de Asia (FABC).

"El mundo se encuentra en una encrucijada existencial”, escribe el cardenal. “El escenario de un holocausto nuclear global, propio de una pesadilla, se está convirtiendo en una posibilidad aterradora. Los ataques masivos a Ucrania y la amenaza inminente del uso de armas de destrucción masiva han llevado al mundo al umbral de la autoaniquilación. Las desgarradoras escenas de los ataques en Ucrania han conmocionado al mundo. Todo esto debe terminar”.

Los obispos de las 16 conferencias episcopales de Asia se unen al llamamiento del Papa Francisco, pidiendo resolver los problemas a través de medios pacíficos. Dicen sentirse algo aliviados ante “la respuesta unida de la comunidad mundial en la ONU, donde más de 140 países han votado en contra de esta guerra de desgaste que amenaza con destruir la seguridad humana y el respeto a las instituciones mundiales".

Invitan a repasar las lecciones de la historia: "Hace un siglo, cuando una pandemia en espiral estrangulaba al mundo, hombres megalómanos desataron los demonios de dos sádicas guerras mundiales. En el siglo XX, más de 135 millones de personas murieron a causa de la guerra. El recuerdo del holocausto sigue siendo una herida que supura en la conciencia humana. Que la historia no se repita en el siglo XXI".

"El mundo ha sufrido mucho”, continúa el cardenal Bo. “Se ha topado con la crisis multidimensional de una pandemia que ha matado a millones de personas y ha asestado un duro golpe a la economía, empobreciendo a millones de personas. Este debe ser un momento para centrarse en la curación global, no en hacer daño".

“Apelamos directamente al Presidente Putin", concluyó el Arzobispo de Rangún, en nombre de todos los obispos de Asia. "Rusia es uno de los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU, encargado de promover la paz mundial y garantizar los derechos de todas las naciones. Hacemos un llamamiento a Rusia para que cese sus ataques a Ucrania y vuelva a la ONU para la resolución pacífica de todas las cuestiones. La paz siempre es posible, la paz es el único camino para el futuro de la humanidad".