Obispos Vietnamitas. El Año Santo nos alienta a evangelizar a la sociedad
Ho Chi Minh City (AsiaNews)- El lema elegido por la Iglesia vietnamita para el Año Santo que iniciará el 8 de diciembre es “La evangelización de la vida social”. Lo anunció la Conferencia episcopal del país en una carta pastoral, enviada el pasado 17 de septiembre a todos los fieles en preparación al Congreso de la actividad misionera que la Comisión para la evangelización organiza cada año desde 2010.
Mons. Alphonse Nguyen Huu Long, arzobispo de la arquidiócesis de Hue y presidente de la Comisión, dijo: “La sociedad moderna de hoy quiere excluir a la religión de la vida social. Muchos jóvenes, en cambio necesitan volver a ella gracias a una nueva espiritualidad. Los jóvenes necesitan una nueva evangelización para reforzar la propia fe y enfrentar los desafíos del materialismo y del consumismo”.
La Comisión para la evangelización involucra a toda la Iglesia cada año para idear nuevos modelos de comunicación de la fe, para “mejorar el modelo de la Iglesia, de sus comunidades y de su participación a la vida pública”, involucrando a laico y familias en la misión evangelizadora”. “Todas las 26 diócesis están llamadas a desarrollar un trabajo de estudio y de investigación sobre la situación de las parroquias y de las comunidades, para compartir las informaciones útiles en el congreso de fin de año.
Presionan por un relanzamiento de la vida misionera los números de los últimos 50 años, que muestran cómo el porcentaje de los católicos en el país es estable pero no en crecimiento. En un estudio realizado por el p, Antoine Nguyen Ngoc Son en el año 2010, se lee que en 1960 en Vietnam había dos millones de católicos sobre una población de 30 millones de habitantes (6,9%).
El porcentaje casi invariado muestra que la estrategia evangelizadora no dio los frutos esperados. Según los datos de la Conferencia episcopal, son 88 mil los católicos ligados a la actividad misionera, pero se registran sólo 41 mil bautismos por año.
El materialismo y el consumismo ponen un ulterior desafío a la Iglesia. Antes de 1975, las diócesis del norte del país no tenían iglesias ni sacerdotes. Por eso muchas personas se alejaron de la fe. Ahora la Iglesia en Vietnam (ya sea al norte como en el sur) tiene una estructura material mucho más eficiente pero hay individuos y familias que son desviados por la mentalidad mundana. Por este motivo la Comisión para la evangelización alienta a tener “una justa conciencia del trabajo misionero. Nosotros debemos aprender, entender los puntos de vista de las personas e idear un recorrido creando actividades para ellos”. Algunos intelectuales católicos dicen a AsiaNews: “La Iglesia vietnamita debe ir con los pobres, evitando el riesgo de la vanidad, como construir iglesias lujosas o celebrar ceremonias que cuestan mucho. Tenemos que estar más preocupados en proclamar la Buena Noticia a la mayor cantidad de gente posible”.
16/09/2014