Nuevas y excelentes detenciones a la sombra del poder uzbeko

de Vladimir Rozanskij

Dos altos responsables de seguridad encarcelados, decenas de personalidades obligadas a dimitir. Acusados de relaciones opacas con empresarios y clanes mafiosos. Se sabe que uno de ellos torturó a un bloguero crítico con el presidente Mirziyoyev.

Taskent (AsiaNews) - Dos altos funcionarios han sido detenidos en Uzbekistán, el primer subdirector de los servicios del Guvd en la ciudad de Taskent, Doniyor Taškhodžaev, y el ex jefe de la administración de seguridad del presidente, Šukrat Rasulov. Además, decenas de otras personalidades fueron detenidas u obligadas a dimitir. Se les acusa de delitos muy graves relacionados con otros casos sensacionales, como el del conocido bloguero Abdukodir Muminov, de 34 años, uno de los críticos más abiertos de la política del presidente Šavkat Mirziyoyev.

El canal de YouTube de Muminov, titulado Ko'zgu, tenía 247.000 seguidores y estaba dedicado a la polémica antipresidencial. El 23 de diciembre de 2022, el bloguero fue atacado por desconocidos, que lo golpearon hasta matarlo. Dos meses después fue detenido, acusado de fraude y malversación, y condenado a siete años de cárcel en agosto de 2023. Sus colegas y partidarios, como el otro bloguero Asliddin Kamol, habían relacionado la agresión y la detención con sus investigaciones periodísticas, centradas en los negocios bastante turbios de los familiares del presidente. La madre de Abdukodir, Sabokhat Abdullaeva, declaró que en prisión intentaron obligar a su hijo a firmar confesiones preparadas de antemano, pero que él se negó.

Según el relato de Abdullaeva, uno de los principales investigadores que presionó a Muminov fue Doniyor Taškhodžaev, que le obligó a arrastrarse por el suelo dándole patadas en las costillas. A consecuencia de la tortura perdió el conocimiento varias veces, pero fue reanimado y sometido a más violencia. Ahora, Taškhodžaev está acusado de encubrir las fechorías de un empresario, Džavlon Junusov, al que los investigadores consideran responsable del intento de asesinato del ex colaborador de la administración presidencial Komil Allamžonov, el 26 de octubre en la región de Tashkent.

Junusov habría obtenido mediante sobornos y violencia las propiedades de varios empresarios de la capital uzbeka, y Taškhodžaev habría encubierto sus delitos, por lo que terminó siendo detenido el 3 de diciembre, según fuentes de los medios de comunicación locales, una semana después de dimitir de su cargo. Había ocupado varios cargos de alto nivel durante su carrera, gracias a sus buenas relaciones con Otabek Umarov, cuñado menor del presidente Mirziyoyev. Él mismo dirigió la reciente operación contra las bandas callejeras, denominada «Los 40 días de la redención», que puso entre rejas a uno de los líderes del hampa local, Salim Abduvaliev.

Al parecer, las acciones emprendidas por Tashkhodžaev tenían como objetivo favorecer a otra organización criminal, la de Ravšan Mukhiddinov, conocido como «Ravšan el Hombre de Oro», sobrino de uno de los jefes históricos de la mafia de Tashkent, Gafur Rakhimov, que había prosperado bajo el régimen del primer presidente de Uzbekistán, Islam Karimov, y luego pasó periodos de «residencia facilitada» en prisiones de Dubai y Estambul. Con la llegada al poder de Mirziyoyev, el «dorado» había regresado a su patria, libre de todo cargo.

Otra excelente detención de los últimos días fue la de Šukrat Rasulov, considerado la «mano derecha» de Umarov y el organizador práctico del atentado contra Allamžonov. El destino de los detenidos, y de todos los que se han visto obligados a abandonar sus puestos, es objeto de las investigaciones de los medios de comunicación, dada la ausencia de declaraciones oficiales. Por los escasos documentos que han llegado a la prensa, se sabe que existe un «plan de acciones decisivas» que contiene información sobre amenazas mutuas de funcionarios de diversas ramas de los servicios secretos y las fuerzas de seguridad uzbekas contra periodistas y filtradores, a la espera de que concluya la «guerra de mafias» en los diversos palacios del poder en Taskent.