'Nosotros venimos de Asia a San Pedro para el último adiós a Francisco'
Entre los peregrinos y curiosos que llegan a Roma para rendir homenaje al féretro de Bergoglio provenientes de Mumbay o de Seúl, de Hanói o de Shanghái, creyentes o no creyentes, algunos cuentan a AsiaNews por qué han venido al Vaticano en este momento histórico. "Somos hindúes pero para nosotros era importante estar aquí". "También nosotros, los coreanos, lo recordaremos durante mucho tiempo". "No pudimos verlo en Singapur, ahora hemos venido como peregrinos".
Ciudad del Vaticano (AsiaNews) - El cielo sobre la plaza de San Pedro está despejado, con esporádicas nubes blancas. El sol calienta, pero hay un viento fresco que se abre paso entre los miles de cuerpos que desde las primeras horas de esta mañana se agolpan en la Vía de la Conciliación, la plaza Pío XII y el atrio. Desde las 11 hasta la medianoche la basílica estará abierta (lo mismo que mañana y el viernes hasta las 19) y la gente espera pacientemente. El sol alto no se condice con el luto: hay demasiada luz. El pueblo - creyentes o curiosos de paso de todos los continentes -, acogido a menudo por el abrazo de la columnata de Bernini, viene desde hoy y durante tres días a dar el último adiós a Francisco, cuyo féretro se encuentra expuesto al público tras ser traslado desde la Casa Santa Marta.
Las medidas de seguridad son impresionantes. Hasta el día del funeral - el sábado 26 a las 10, en el atrio de San Pedro, el cardenal Giovanni Battista Re presidirá la ceremonia - se esperan cerca de 200.000 fieles y 170 delegaciones extranjeras. Es casi finales de abril, pero la Protección Civil italiana distribuye botellas de agua. En las entradas cerca de la columnata solo tienen acceso los periodistas y quienes poseen permisos especiales. Hay muchos agentes del orden y voluntarios con el chaleco verde brillante del Jubileo. Hoy se puede vivir la peregrinación hacia la Puerta Santa y acceder también al féretro del Papa venido del “fin del mundo”, que después será depositado en Santa María la Mayor.
En la marea de personas que han venido para rendir el último homenaje a Bergoglio - o solo para asistir a un hecho histórico como el que se está desarrollando en el Vaticano - también está presente Asia. Por ejemplo, Maesh, indio de Mumbay, se encuentra en Roma con su esposa Badura y sus dos hijos pequeños. Está tomando fotos de la plaza abarrotada. “Hemos venido dieciséis días de vacaciones - dice a AsiaNews -. Somos hindúes, pero cuando supimos la noticia del Papa, inmediatamente pensamos que era importante estar aquí”. “Fue un Papa importante para todo el mundo”, le hace eco su esposa. Para la pareja, el papa Francisco era “una buena persona”. “Por un hombre tan importante, lo mínimo que podíamos hacer era dedicarle aunque sea solo cinco minutos de nuestro tiempo”. Maesh y Badura no visitarán el féretro de Bergoglio. “En la basílica ya estuvimos ayer, hoy hemos venido solo para ver la multitud”, añade.
AsiaNews también habló con Hai, vietnamita de Hanói, la capital. Espera sentado en las jardineras que bordean el corredor que conduce a los peregrinos desde la nueva plaza Pía hasta la basílica. “Estoy en Roma por trabajo - dice -. Soy budista y he venido a San Pedro porque quería ver la situación con mis propios ojos. Y para participar en el funeral del Papa”. Del pontífice que falleció la mañana del Lunes del Ángel Hai recuerda sobre todo su compromiso por la paz en Ucrania. “Luchó contra la pobreza”, sigue diciendo. A poca distancia, Yumi y Li, chinos de Shanghái, se están tomando una selfie. “Estamos viajando y el Vaticano es uno de los lugares más hermosos”, dicen. “No conocíamos la situación del Papa. Lo supimos hace solo unos días, por las noticias”. “No somos personas religiosas - añaden -. Pero queríamos echar un vistazo de todos modos, después iremos al Coliseo y más tarde nos espera el vuelo de regreso”.
Seo-Yeon, de 33 años, coreana de Seúl, se encuentra en la fila para llegar al féretro del Papa Francisco. Dice que no podía perderse este “momento histórico”. “Cuando murió el Papa, quería traer aquí mi tristeza”, continúa. Seo-Yeon estaba viajando por Italia. “Creo en los valores y en la fuerza que él trató de difundir en el mundo. Es una oportunidad única estar aquí”, dice. También recuerda el viaje del pontífice a Corea del Sur en 2014. “Fue una presencia especial - afirma -. Los coreanos lo recordarán durante mucho tiempo. Creo que su vida no solo estuvo dedicada a la religión; trató de salvar el mundo diciéndonos que todos somos parte de la humanidad”. Seo-Yeon asistía antes a una parroquia, pero ya no practica. “Creo en los valores y en el poder del bien en las religiones”, confiesa a AsiaNews.
También hay algunos que esperaban poder estar con el Papa Francisco en la audiencia general de hoy miércoles, suspendida por razones obvias. “Cuando el Papa visitó Singapur no tuve la oportunidad de conocerlo. Y quería hacerlo aquí”, dice Ida, de visita en Roma con un grupo de católicos de Indonesia que se distingue por los pañuelos amarillos en el cuello y el logo del Jubileo. “Habíamos planeado venir a verlo precisamente hoy en la plaza de San Pedro, ya teníamos la reserva. Todo estaba preparado”, cuenta. “Ahora entraremos para darle nuestro último adiós, con extremo respeto. Es uno de los Papas más sabios que jamás haya existido”.
23/12/2015