Mujeres tamiles protestan con sus hijos frente a una base militar: quieren que les devuelvan sus tierras (Fotos)
La protesta se lleva a cabo desde hace más de dos semanas. Las mujeres se manifiestan en nombre de las 84 familias que fueron evacuadas durante la guerra civil. Los niños están perdiendo días de clases. Una delegación de católicos y activistas lleva apoyo y confortación. Sacerdote: “No son como nosotros, los hombres. No cederán hasta que no hayan obtenido lo que piden”.
Colombo (AsiaNews)- Un grupo de valientes mujeres tamiles acampan desde hace más de dos semanas frente a una base del ejército y se niegan a desalojar el área hasta que no les sean devueltas las tierras secuestradas durante la guerra civil. Las mujeres han dado vida a una protesta pacífica (en lengua local “Sathayagrah”) y con ellas están también sus hijos, que de este modo están perdiendo horas de clase. A a AsiaNews las mujeres afirman. “Ahora se acabaron los sufrimientos y las evacuaciones forzadas”.
La huelga se inició el 31 de enero pasado, después que el presidente Maithripala Sirisena anuló una visita a la zona, programada para el 25 de enero. Las mujeres protestan en nombre de las 84 familias que residían en Pillavukudirippu, en el distrito de Mullaitivu. Al estallar el conflicto civil que durante casi 30 años enfrentó al ejército con los Tigres tamil, la población fue obligada a escapar. Sus casas, terrenos y propiedades fueron confiscados por los militares y ocupados por años por las fuerzas de la aviación.
Hace casi 7 años que los evacuados piden que se les devuelvan las tierras. Mientras tanto, fueron colocados en un barrio residencial denominado “Keppapilavu”, que no cuenta con servicios adecuados. Ayer, el secretario del distrito de Mullativu visitó la zona e invitó a las mujeres a renunciar a la protesta, anunciando también la apertura de un debate sobre sus problemas. En respuesta, las tamil rechazaron la oferta: “Estamos cansadas de tantas declaraciones”.
La mayor parte de las mujeres han perdido sus maridos durante la guerra y ahora deben criar a sus hijos. En estas dos semanas no fueron a la escuela. La pequeña Yalinin dice que ella y su hermana no frecuentan las clases porque “nuestra madre está haciendo esta protesta”. “No hay nadie que se pueda ocupar de nosotras”. El departamento educativo de la zona organizó cursos de noche para estos pequeños, que de ningún modo pueden ser comparados con las lecciones dadas en clase.
Una delegación de católicos y activistas de Colombo visitaron a las manifestantes y les llevaron su solidaridad y confortación. Sor Rasika Pieris afirma: “Apreciamos mucho la valentía de estas mujeres y pedimos al gobierno que devuelva las tierras. De este modo podrán recomenzar una vida después de tanto sufrimiento. Hermaan Kumara, coordinador del National Fisheries Solidarity Movement (NAFSO), agrega que “el presidente Sirisena debe resolver inmediatamente la situación, puesto que él fue elegido con los votos de los tamiles”. Según el p. Father Sujaharan, de los Oblatos de María Inmaculada, “estas mujeres no son como nosotros, los hombres. No cederán que el gobierno resuelva sus pedidos”.
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