Mujeres birmanas víctimas de la violencia en la web del régimen golpista

Un informe de Myanmar Witness revela que los ataques a las redes sociales se han quintuplicado desde el golpe de Estado en 2021. Práctica generalizada de "doxxing" con campañas selectivas. Muchos mensajes ofensivos se han eliminado. Sin embargo, la investigación solo puso en evidencia una pequeña parte de los abusos perpetrados a través de Internet.

Rangún AsiaNews/Agencias) - Las mujeres de Myanmar que criticaron al gobierno de la junta golpista en las redes sociales han sido objeto de violencia en la web, con amenazas de violación y muerte, por parte de cuentas vinculadas al gobierno militar que tomó el control del país el 1 de febrero de 2021 con un golpe y desató el conflicto civil en curso.

Así lo demuestra un estudio publicado en los últimos días por Myanmar Witness que se realizó en colaboración con Sisters to Sisters, una organización que apoya a las mujeres en y desde Myanmar. Analizando cientos de publicaciones en Facebook y en varios canales de Telegram, las dos ONG descubrieron que los abusos en línea de carácter político se han quintuplicado desde que el ejército tomó el poder, con un claro predominio de los ataques en Telegram, donde el contenido ofensivo aumentó 500 veces más que en otras redes sociales.

El informe señala que “las víctimas denunciaron ataques contra sus opiniones, su persona y su dignidad, y declararon que habían recibido amenazas de violación, muerte y violencia, con graves repercusiones emocionales y psicológicas”.

"Las prácticas de abuso en la web y de doxing -continúa el documento- están teniendo el efecto de silenciar la disidencia y obligan a las mujeres a retirarse de la vida pública". Doxxing es el acto de difundir información personal de un individuo (nombre, dirección, foto) sin su consentimiento y, según la investigación, "el 28% de todas las publicaciones analizadas en el estudio incluyen una invitación explícita para que las mujeres objeto de ataque sean castigadas offline"; también piden "a las autoridades militares de Myanmar que arresten a la mujer en cuestión y/o confisquen sus bienes".

En la mayoría de los casos las mujeres atacadas habían compartido comentarios en las redes sociales a favor de la resistencia armada, formada por las milicias étnicas y las Fuerzas de Defensa del Pueblo, el brazo armado del Gobierno de Unidad Nacional, integrado en su mayor parte por diputados del ejecutivo anterior en el exilio.

El estudio también revela que los ataques de usuarios progubernamentales fueron coordinados para amplificar las campañas contra las mujeres, utilizando un lenguaje vulgar, violento y sexualizante. "El lenguaje y las imágenes sexuales deshumanizantes reproducen las tácticas notoriamente utilizadas por el ejército birmano para atacar a la población rohingya", sigue diciendo el informe, que en una segunda versión especifica que la mayoría de las publicaciones violentas han sido eliminadas por Meta y Telegram.

Sin embargo, Myanmar Witness subrayó que las revelaciones contenidas en su estudio son solo "la punta del iceberg" de los abusos por Internet cometidos por partidarios de la junta militar, lo que demuestra que el conflicto civil entre el régimen y las fuerzas prodemocráticas también se libra en el ciberespacio.