Mosul, dos ancianas cristianas a salvo del ISIS gracias a una familia musulmana
La historia salió a la luz hace pocos días, cuando el patriarca Sako se reencontró con una de las sobrevivientes. Camilla Haddad y Mary Fathohi Weber fueron acogidas y protegidas por Elias Abu Ahmed, quien las alojó junto con sus dos esposas y 14 hijos. La anciana de 98 años dice sentirse bien, aunque "a veces le duelen las piernas".
Mosul (AsiaNews) - Dos ancianas cristianas quedaron a salvo del ISIS. Fue en los oscuros y terribles años de la dominación yihadista del Estado Islámico en Mosul y en gran parte de la llanura de Nínive, en el norte de Irak. Se salvaron gracias a una familia musulmana, que las acogió y las ocultó de los ojos de los milicianos. La historia de Camilla Haddad y Mary Fathohi Weber ha salido a la luz en los últimos días. El sitio web del Patriarcado Caldeo la mencionó y también se refirió a ella el cardenal Louis Raphael Sako, quien intercambió algunas palabras con una de las dos mujeres, ya que la otra lamentablemente falleció por causas naturales.
Se había perdido la pista de ambas en el verano de 2014, durante la primera fase de la ocupación de la metrópoli norteña por los mercenarios del "Califato" de al-Baghdadi. Los largos años de silencio y misterios en torno a su destino encontraron respuesta gracias al compromiso y la tenacidad de los dirigentes cristianos iraquíes, que nunca dejaron de buscarlas.
La señora Haddad hoy tiene 98 años pero sigue en buena forma. Vivió en la casa del musulmán Elias Abu Ahmed, quien las escondió a ella y a su amiga. Durante las reiteradas inspecciones del Estado Islámico (EI, ex Isis), el hombre las presentaba como su abuela y su tía, para salvarlas. También se ocupó de la salud de ambas, y las trató como miembros de su familia, como hizo con sus dos esposas y 14 hijos.
"Las consideraba como parte de mi familia”, cuenta el hombre, y repite que 'todos somos hermanos'. Se trata de un testimonio de caridad y apoyo entre personas de distintos credos, que alimenta el deseo de las personas de permanecer unidas y ayudarse mutuamente a pesar de las grandes dificultades.
Una de las dos mujeres, la señora Weber, falleció el primero de enero de 2015. Su amiga Camilla Haddad sigue gozando de buena salud, teniendo en cuenta su avanzada edad. Incluso tiene su propia habitación en la casa y se queda despierta hasta tarde. Hace pocos días, la mujer mantuvo una breve conversación telefónica con el patriarca Sako, que la había conocido junto con sus hermanas Najeeba y Eileen hace muchos años, cuando aún era sacerdote en Mosul.
Fuentes del Patriarcado informan de que durante la conversación, el cardenal se presentó como "Abouna (padre, en árabe) Louis" para ayudar a la mujer a recordar, pues ella desconocía que hoy es el patriarca de la Iglesia caldea. Ella y su hermana, recuerda el cardenal, siempre asistían a la iglesia y colaboraban con las obras para asistir a los pobres.
Sobre su estado de salud, Camilla dijo que se siente “bien, pero me duelen las piernas" mostrando al mismo tiempo una gran presencia de ánimo. Y ante la propuesta de ser trasladada a un centro sanitario donde pueda recibir más cuidados, la anciana declinó la invitación, dando las gracias, ya que dice que se siente “atada” a la familia musulmana que la ha "acogido y protegido" y quiere "quedarse en la casa de Abu Ahmed". Según fue anticipado por AsiaNews, citando fuentes del patriarcado caldeo, Camilla Haddad se reunirá con el patriarca caldeo para una jornada de celebración en los próximos días.
