Mons. Machado: Asia, fraternidad humana con el Islam, pero también con otras religiones
El secretario de la Conferencia Episcopal de la India, ex subsecretario del Pontificio Consejo para el Diálogo Interreligioso, habló sobre el camino de cristianos y musulmanes que señala el viaje del Papa a Irak y dijo que "Asia es un contexto multirreligioso, los enfoques deben ser diferentes. Pero no hay alternativa al diálogo: para nosotros es una cuestión de vida o muerte, la posibilidad de sobrevivir o sucumbir”.
Mumbai (AsiaNews) - ¿Qué dice el diálogo del Papa Francisco con el mundo musulmán a los países de Asia, comenzando por el reconocimiento de la fraternidad humana común que - tras la firma de la declaración de Abu Dhabi en 2019 - ha cobrado nuevo impulso con su viaje a Irak? El arzobispo Felix Machado, secretario general de la Conferencia Episcopal de la India y ex subsecretario del Pontificio Consejo para el Diálogo Interreligioso, reflexiona sobre este tema para AsiaNews. Mons. Machado señala la importancia de este camino, pero también la necesidad de situarlo en el contexto específico de Asia, evitando que el diálogo con el mundo musulmán se perciba como una "conspiración" contra las otras tradiciones religiosas. “Los enfoques deben ser diferentes -explica- y los contextos se deben tomar muy en serio. Pero no hay alternativa al diálogo: para nosotros es una cuestión de vida o muerte”.
El Papa Francisco puso en marcha este proyecto sobre la fraternidad humana y quiere avanzar de manera transversal en la comunidad musulmana, sin excluir ninguna religión. Cuando el Papa toma algo entre manos, quiere ir a la raíz. Y es importante que nosotros llevemos adelante a nivel local lo que comenzó el Vicario de Cristo: la contextualización al nivel de base es muy importante.
El diálogo con los musulmanes en nuestra parte del mundo es muy importante. El Papa nos ha dado impulso y debemos seguir su ejemplo. Puede ser difícil pero este es el desafío de la misión cristiana, las dificultades se deben superar y no convertirse en una excusa. El diálogo fructífero puede tener lugar cuando hay voluntad para ello. Muchos ya lo han hecho. En la India existe la ISA (Islamic Study Association), que es una organización católica. Sus miembros, como católicos, se reúnen, se apoyan y se alientan mutuamente para llevar a cabo un diálogo cristiano-islámico significativo. Esta organización ya tiene muchos años, tuve la oportunidad de colaborar con ella y siempre la apoyé cuando estaba trabajando en Roma.
Pero debemos prestar atención a lo siguiente: Asia es un continente multirreligioso y multicultural, India tiene el hinduismo, Sri Lanka, Tailandia y Myanmar, el budismo, Pakistán, Bangladesh e Indonesia, el Islam, Japón y Corea siguen teniendo el budismo pero también una fuerte influencia del chamanismo y la religión tradicional japonesa. Por eso los diálogos bilaterales son una propuesta muy delicada: se perciben inmediatamente como una "conspiración". En Asia, los diálogos multilaterales son una propuesta más segura. Cuando los cristianos se reúnen solo con musulmanes puede haber malentendidos.
Dicho esto, tenemos que encontrar nuestro propio enfoque para el diálogo. El Papa Francisco es valiente y audaz: los cristianos del mundo occidental no se atreven a comportarse como él. El Papa actúa sobre la base de los estudios que han realizado los islamólogos de los jesuitas y los Padres Blancos, que fueron desalentados o tomados poco en serio. Él quiere resolver el problema, no solo domesticarlo lo suficiente para seguir coexistiendo.
Asia, como expliqué antes, no es un continente monolítico. Y tampoco lo es la India. Tiene que haber enfoques diferentes y los contextos se deben tomar muy en serio. Pero no hay alternativa al diálogo: para nosotros es una cuestión de vida o muerte, la posibilidad de sobrevivir o sucumbir. También se aplica a nuestra nación. Consideramos que el diálogo es una decisión irrenunciable. Será muy arriesgado, pero seguimos al Papa Francisco: es una persona auténtica, sabia y espiritual.