Mons. Chow invitó al arzobispo de Beijing a visitar Hong Kong
Concluyó la visita de cinco días a la capital china. Cuando los periodistas locales le preguntaron sobre el patriotismo, el obispo de Hong Kong respondió que “todos debemos amar a nuestro país y a la Iglesia”. Hasta el momento, no hay rastro del viaje en los sitios web de los organismos católicos oficiales.
Hong Kong (AsiaNews/Agencias) – Concluyó ayer por la mañana, con una misa en la iglesia de San José, la visita de cinco días a Beijing del obispo de Hong Kong Mons. Stephen Chow. Por invitación directa del arzobispo de Beijing Mons. Li Shan, quien también es presidente de la Asociación Patriótica de Católicos Chinos, ha sido la primera visita de este tipo desde los viajes del cardenal John Wu, el último de los cuales se realizó en 1994.
Al concluir la misa que concelebró el jueves en Beijing con Li Shan, en la Iglesia del Santísimo Salvador, Mons. Chow declaró a los medios internacionales que había invitado al arzobispo de Beijing a devolverle la visita en Hong Kong y que la propuesta había sido recibida de manera "bastante positiva". Subrayó la importancia de estos días para el intercambio de experiencias, citando en particular el tema de la formación de los jóvenes sacerdotes. El martes, Mons. Chow pudo visitar el gran seminario nacional de Beijing, donde también estudian muchos candidatos al sacerdocio de otras diócesis de China continental.
Cuando le preguntaron sobre el tema del patriotismo respondió: “Todos debemos aprender a amar a la patria y a la Iglesia. Nadie quiere que le vaya mal a su país. Ser patriota es un deber. Tanto si vives en Hong Kong como en el continente, debes amar a tu país".
En la breve homilía durante la celebración -reproducida por el sitio web VaticanNews- monseñor Chow había hablado a los fieles presentes sobre el camino sinodal promovido por el Papa Francisco en las Iglesias de todo el mundo. Este camino -explicó- “invita a todos los miembros de la Iglesia a escucharse unos a otros y sobre todo a aprender a escuchar al Espíritu Santo, que nos guía en nuestro camino. El Espíritu Santo es el Dios de unidad, no de división. Por eso - concluyó - esperamos que la diócesis de Hong Kong, la de Beijing y todas las comunidades católicas continentales puedan tener una colaboración y un intercambio más intensos en la comunión del amor”.
En los últimos días se ha subrayado en varias oportunidades el carácter estrictamente eclesial de esta visita a la arquidiócesis de Beijing. El martes Mons. Chow se reunió con algunos representantes del organismo gubernamental SARA (Administración Estatal para Asuntos Religiosos), pero -como era fácil de prever- no asistió a ninguna reunión oficial ni hubo noticias sobre ningún encuentro con Mons. Shen Bin, el obispo que hace poco fue trasladado unilateralmente por las autoridades chinas a la sede de Shanghái, quien en su calidad de presidente del Consejo de Obispos Chinos (organismo no reconocido por la Santa Sede) se reúne a menudo con los dignatarios que visitan Beijing.
Cabe también señalar que, hasta la fecha, ni el sitio web oficial de los organismos católicos chinos China Catholic ni la cuenta de la arquidiócesis de Beijing en WeChat han publicado noticias o imágenes sobre la visita de Mons. Chow a Beijing. La principal fuente de información han sido los medios de Hong Kong y las agencias internacionales.