Misa de Francisco en el estadio de Yakarta: "Atrévanse a tener esperanza"
Ante miles de personas reunidas en las dos instalaciones deportivas cercanas, el pontífice invitó a la Iglesia local a "salir a mar abierto". "La Palabra del Señor no puede permanecer como una bonita idea abstracta, nos pide que cambiemos nuestra mirada, de los malos hábitos, de los miedos y de las mediocridades". Mañana por la mañana será la despedida de Indonesia y la partida hacia Papúa Nueva Guinea.
Yakarta (AsiaNews)- “No se cansen de zarpar, no se cansen de echar las redes, no se cansen de soñar y de seguir construyendo una civilización de paz”, dijo esta tarde el Papa Francisco a la comunidad católica de Indonesia reunida en Yakarta para la solemne liturgia eucarística, momento culminante de su visita al país.
En el estadio Gelora Bung Karno y en el cercano estadio Madya A (que el pontífice también recorrió en el papamóvil antes de la misa, acompañado por el cardenal Suharyo), se reunieron en total cerca de 100.000 fieles, mientras que otros miles siguieron la celebración vía streaming en sus parroquias. El presidente indonesio Joko Widodo, tal como había prometido, también quiso estar presente en el momento más importante para la comunidad católica, que es el último momento público antes de la ceremonia de despedida que tendrá lugar mañana por la mañana en el aeropuerto de Sukarno-Hatta y la partida hacia Papúa Nueva Guinea, segunda etapa de este viaje.
A partir del pasaje del Evangelio de Lucas en el que Jesús alienta a Pedro a zarpar de nuevo después de una noche infructuosa, y pesca una gran cantidad de peces (Lc 5,1-16), Francisco invitó a la Iglesia indonesia a asumir el riesgo de apostar por la Palabra de Jesús, que "no puede quedar como una bonita idea abstracta, o despertar sólo la emoción del momento - afirmó - , sino que nos pide que cambiemos nuestra mirada, que nos dejemos transformar el corazón a imagen del de Cristo. También a nosotros, hermanos y hermanas, con la fuerza abrasante de su Palabra, el Señor nos pide ir mar adentro, alejándonos de las orillas pantanosas de los malos hábitos, de los miedos y de las mediocridades, para atrevernos a emprender una nueva vida".
Francisco invitó sobre todo a no dejarse desalentar por las dificultades y recordó una frase de santa Teresa de Calcuta, cuya fiesta litúrgica es hoy: "Cuando no tengamos nada que dar, demos esa nada. Y recuerda: aunque no coseches nada, nunca te canses de sembrar". “Atrévanse siempre a soñar con la fraternidad, que es un verdadero tesoro entre ustedes - dijo el pontífice a los católicos indonesios -. Con la Palabra del Señor, los animo a sembrar amor, a recorrer confiados el camino del diálogo, a seguir manifestando vuestra bondad y amabilidad con la sonrisa que los caracteriza ¿Les han dicho que son un pueblo sonriente? Por favor, no pierdan la sonrisa y sigan adelante. Y sean constructores de paz. Sean constructores de esperanza".
Esta mañana - en la sede de la Conferencia Episcopal, después de la visita a la mezquita - el pontífice se reunió en privado con un grupo de enfermos, discapacitados y pobres asistidos por diversas organizaciones benéficas. Entre ellos se encontraba Mikail Andrew Nathaniel, un joven de 18 años que padece un trastorno del espectro autista, quien contó con alegría que había sido seleccionado para participar en los juegos paralímpicos locales de natación. El Papa Francisco lo felicitó e invitó a todos a convertirse en "campeones del amor en la gran Olimpíada de la vida".
“Todos nos necesitamos unos a otros, y eso no es malo – añadió -. De hecho, nos ayuda a comprender cada vez mejor que el amor es lo más importante de nuestra existencia, a darnos cuenta de cuánta gente buena hay a nuestro alrededor. También nos recuerda cuánto nos ama el Señor a todos, más allá de cualquier límite o dificultad. Cada uno de nosotros es único ante sus ojos, ante los ojos del Señor, y Él nunca se olvida de nosotros, jamás. Recordemos esto para mantener viva nuestra esperanza y comprometernos también nosotros, sin cansarnos jamás, a hacer de nuestra vida un don para los demás".
