Manila: una barra de jabón en cada celda para la justicia reparadora

de Santosh Digal

Las cárceles de Filipinas se encuentran entre las más superpobladas del mundo: con ocasión de la Semana de Sensibilización sobre las Prisiones, los jesuitas que se ocupan de la pastoral penitenciaria piden programas de justicia reparadora y la agilización de los procedimientos judiciales.

Manila (AsiaNews) - El gobierno filipino la denomina oficialmente "Semana nacional de sensibilización penitenciaria". Capellanes de prisiones, monjas y voluntarios de prisiones esperan que todos en la sociedad filipina celebren el evento que la Iglesia también celebra cada año en octubre. Para que todos puedan aprender y compartir historias de cambio y encontrar más formas en las que los presos y las personas libres puedan trabajar juntos por caminos de justicia reparadora.

En Filipinas, los jesuitas son la congregación religiosa que más trabaja en las cárceles. Desde su creación en 1994, 23 padres jesuitas han trabajado para el Philippine Jesuit Prison Service (PJPS). El P. Vic Labao, por ejemplo, trabaja en la New Bilibid Prison (NBP) de Manila, la mayor de Filipinas. "La ayuda que prestamos forma parte de las necesidades diarias, como la distribución de barras de jabón a los más de 34.000 reclusos de la mayor prisión del país", explica el P. Matthew Delgado, coordinador de incidencia política del PJPS. Los jesuitas también colaboran con el Correctional Institution for Women (CIW), una cárcel de mujeres en Mandaluyong: "Con la ayuda de los voluntarios y la sensibilización de esta semana, podemos hacer más de lo que nunca creímos posible. Esto nos permite aumentar el impacto de los programas activados por la Iglesia en todo el país".

El objetivo de la Iglesia filipina es apoyar el camino del cambio y la humanización de la detención en las cárceles filipinas, con vistas a la rehabilitación de las personas privadas de libertad. "Juntos podemos crear un futuro mejor para las personas que no están libres en el país", concluye el P. Delgado.