Manila y Francisco: A los trabajadores migrantes los llamaba "contrabandistas de la fe"
La Iglesia filipina y su gente rinden homenaje a Bergoglio. El cardenal David lo recuerda como un pastor en medio del pueblo: "Eligió los caminos polvorientos hacia las periferias". El cardenal Advíncula recuerda su visita de 2015 como "un momento de gracia". El presidente Marcos declaró tres días de duelo nacional. El movimiento para el diálogo islámico-cristiano Silsilah de Mindanao expresó sus condolencias: "Construir fraternidad humana, como él nos recuerda".
Manila (AsiaNews) - La Iglesia en Filipinas - el país con más católicos de Asia - también se unió al luto en el mundo entero por el fallecimiento del Papa Francisco. En un mensaje dirigido a los fieles, el cardenal Pablo Virgilio David, presidente de la Conferencia Episcopal de Filipinas (CBCP), dijo que el Papa argentino "fue un pastor que caminó con su pueblo, eligiendo a menudo el camino polvoriento hacia las periferias". "Nos invitó a ser una Iglesia que escucha, que abre los oídos a los gritos de la gente y el corazón a los estremecimientos del Espíritu", añadió.
"A través de su visión de la sinodalidad, el Papa Francisco nos desafió a redescubrir la Iglesia no como una fortaleza, sino como un hospital de campaña, que acoge, cura y camina junto a la gente". Con importantes documentos que marcaron su pontificado - como Laudato Si' y Laudate Deum - "enseñó a ver la tierra como nuestra casa común, confiada a nuestro cuidado, sobre todo para el bien de las generaciones futuras". El cardenal David, que es obispo de Kalookan, recordó cuando Bergoglio llamó a los trabajadores migrantes filipinos de ultramar "contrabandistas de la fe", "recordándonos que el testimonio de vidas sencillas y fieles puede cruzar fronteras y tocar los corazones allí donde los misioneros oficiales no pueden llegar".
Por su parte el cardenal José F. Advíncula, arzobispo de Manila, dijo en un mensaje que la Iglesia filipina agradece a Dios por el don del Papa Francisco. "Un regalo muy valioso de Dios a la Iglesia, al mundo y al pueblo filipino", afirmó. "Desde el comienzo de su pontificado en 2013, Francisco nos recordó que la Iglesia debe estar cerca de los pobres, ser misericordiosa con todos y una casa acogedora para los olvidados. Estas palabras resuenan en nuestros corazones y hablan profundamente al alma de los fieles filipinos". Advíncula también se refirió a la visita de Francisco a Filipinas en 2015 como "un momento de gracia que ha quedado grabado para siempre en la memoria nacional".
"Bajo la lluvia de Tacloban, junto a los supervivientes del supertifón Yolanda (Haiyan) en 2013, el Papa Francisco nos mostró lo que significa sufrir con los demás y encontrar esperanza en medio del dolor", agregó el cardenal. En Luneta, durante la celebración con millones de personas, "abrazó nuestra alegría, nuestra fe y nuestro deseo de una Iglesia que camine con su gente", recordó. Advíncula también dijo que, con su presencia, sus oraciones y su predicación, "nos confirmó en la fe, reavivó nuestra esperanza y nos alentó en la caridad. Recordamos con afecto su amor especial por los filipinos de todo el mundo".
También el presidente Ferdinand R. Marcos Jr. expresó profundo pesar por el fallecimiento del Papa Francisco, que era afectuosamente conocido por los filipinos como "Lolo Kiko". "Amo a este Papa. El mejor Papa de mi vida, en lo que a mí respecta", dijo el 21 de abril, el día de su muerte. Por su parte, en una declaración publicada el 22 de abril, el ministro principal interino de la Región Autónoma de Bangsamoro en el Mindanao musulmán (BARMM), Abdulraof Macacua, dijo que el Gobierno de Bangsamoro también ofrece sus más sentidas condolencias a la Iglesia católica, a los habitantes católicos de la región y a todos los que lloran la pérdida de Bergoglio.
Ayer, 23 de abril de 2025, el presidente Ferdinand R. Marcos Jr. declaró tres días de luto nacional del 23 al 26 de abril de 2025, para honrar la memoria del Papa fallecido. En el anuncio declara: "Durante sus 12 años de servicio como jefe de la Iglesia católica romana, Francisco ha guiado a más de 1.300 millones de católicos en todo el mundo, incluidos millones de filipinos, y se convirtió en un símbolo global de humildad, compasión y paz, dedicando su ministerio al cuidado de los pobres, los marginados y los vulnerables, y defendiendo incansablemente la justicia social, la igualdad y el diálogo interreligioso".
Marcos afirma que Francisco "ocupa un lugar especial en el corazón del pueblo filipino", particularmente por su visita apostólica a Filipinas en enero de 2015, en la que "ofreció consuelo y solidaridad a las víctimas del tifón Yolanda y felicitó la resiliencia de los fieles filipinos". "La desaparición del Papa Francisco es un momento de profundo dolor para la Iglesia católica y para el pueblo filipino, que reconoce en él a un líder global de compasión y a un incansable defensor de la paz, la justicia y la dignidad humana", dice el presidente.
El Silsilah Dialogue Movement - movimiento filipino nacido en Zamboanga en 1984 para promover la amistad entre cristianos y musulmanes - también expresó su pésame por la muerte del Papa. En su comunicado hace referencia a la actualidad del "Documento sobre la fraternidad humana por la paz mundial y la convivencia común" que firmó Francisco junto con el imán de Al-Azhar, Ahmad Al-Tayyeb, en 2019. "Hoy reafirmamos nuestra misión gracias a esto", dice. "Es lo mismo que creemos y compartimos cuando promovemos la Cultura del Diálogo". "Nosotros también, en solidaridad con todos, decimos ¡Padayon! (adelante) por el camino del diálogo y la paz, para construir juntos una fraternidad humana, como nos recuerda el Papa Francisco".
08/05/2019 17:11