Makassar, molotov contra una iglesia protestante. La policía: ‘No es terrorismo’
El autor del hecho, Jampardi, es un joven de 18 años, que quería robar “objetos preciosos”, pero fue “emotivamente provocado” por las cámaras de seguridad. Los Toraja son un grupo étnico en su mayoría cristiana, que conforma cerca del 80% de la población local. En el pasado el territorio ha sido teatro de episodios de violencia sectaria, que han visto contraponerse a grupos extremistas islámicos y protestantes.
Yakarta (AsiaNews)- A través del lanzamiento de un artefacto incendiario, esta mañana, un joven intentó incendiar la iglesia étnica protestante Toraja Masale de Panakkukang (foto) en Makassar, capital de la provincia de las Célebes del Sur.
La policía local informa que “a las 5.00 de hoy, un hombre se subió al muro de la iglesia y lanzó una botella molotov contra la puerta de ingreso”. Tras domar el pequeño incendio, las autoridades identificaron al autor del hecho, un joven cuyo nombre es Jampardi, de 18 años de edad.
Según lo que marcan las reconstrucciones de los investigadores, el joven intentaba robar “objetos preciosos” del lugar de culto, pero fue “emotivamente provocado”, una vez que se dio cuenta que lo filmaban a través de las tele-cámaras de seguridad. Irwan Anwar, jefe de la policía de Makassar, declara que “no se trata de terrorismo, sino de un simple delito común”. “Estamos frente a un intento fallido de delito”, agrega.
Los toraja son un grupo étnico en su mayoría cristiana (cerca del 80% de la población), originario de las zonas montañosas de las Célebes Centrales y del Sur. Son necesarias unas 8-9 horas de viaje en auto para llegar a “Tana Toraja” desde Makassar. Célebre destino turístico, con el correr de los años, el territorio devino teatro de episodios de violencia sectaria, donde se enfrentaron grupos de extremistas islámicos y protestantes.
Entre 1998 y el año 2000 en Poso, localidad de las Célebes Centrales de mayoría islámica, se verificaron una serie de sangrientos enfrentamientos. Solo un tratado de paz firmado por las dos facciones en diciembre de 2001, se puso fin a la violencia. A pesar de ello, la región siguio siendo un bastión de organizaciones islamistas como la East Indonesia Mujahedeen, que incluso después de la firma del acuerdo realizó varios atentados terroristas contra la comunidad cristiana.
En los últimos años, el gobierno del presidente Joko “Jokowi” Widodo ordenó una serie de operaciones militares contra los islamistas y en julio de 2016 las fuerzas de seguridad asesinaron al líder del grupo, Abu Wardah Santoso.
17/12/2016 13:14
23/09/2016 16:27
