Madhya Pradesh, atacado un centro para niños con discapacidad a cargo de las monjas agustinas

de Nirmala Carvalho

En la noche un grupo de desconocidos lanzó ladrillos pesados a la casa de las monjas Agustinas en Pipaldhar, en la Diócesis de Khandwa. El edificio alberga un centro para el cuidado de los niños discapacitados. Las hermanas están ampliando la estructura para mejorar la recepción. Activista cristiano: "El ataque es una afrenta contra la sociedad misma. La acción en el medio de la noche refleja la oscuridad en las mentes y los corazones de los atacantes".

Mumbai (AsiaNews) – Ha sido atacada en las primeras horas de la madrugada el hogar temporal de la Congregación de las monjas Agustinas (Osa) en Pipaldhar, en el Estado indio de Madhya Pradesh. Aún se desconoce a los autores del ataque, que lanzó ladrillos pesados en el techo de la residencia. Dentro del edificio hay un centro de rehabilitación para niños con discapacidad mental. Afortunadamente en el momento del ataque no estaba presente ningún menor. Ilesas también las cuatro monjas que viven en la casa.

Sor Jaya, la Congregación de las religiosas agustinas, dice a AsiaNews: "Eran las 03:15 del martes [12 de mayo] de la mañana. Todos estábamos durmiendo, cuando de repente los ladrillos pesados fueron lanzados contra el techo de la casa y cayó en la habitación donde dormimos. Gracias a la Divina Providencia del Señor, nadie resultó herido y los niños no estaban presentes en ese momento. Ahora las hermanas tenemos miedo".

Sor Jaya explica que los religiosos han establecido su residencia en la Diócesis de Khandwa un centro para la rehabilitación de niños con trastornos mentales. Durante los últimos cuatro años 14 niños se han beneficiado de la atención de los expertos y ahora la congregación está en la construcción de una nueva instalación más grande para dar aún un alojamiento a los niños necesitados. "Queremos construir esta casa en nuestra propia casa. Por esta razón, las hermanas residen en un hogar temporal".

Sajan K George, presidente del Global Council of Indian Christians (Gcic), condena el incidente en términos inequívocos: "Este es un ataque no sólo contra las hermanas, sino también contra los niños, los que tienen más dificultades. Todo esto aumenta la gravedad del acto. El ataque es una afrenta contra la sociedad misma, a la que las religiosas ofrecen un incansable y generoso cuidado de los niños necesitados. Las hermanas re-educan a los niños que la misma sociedad margina. Los autores del crimen revelan una falta de moralidad. La acción tuvo lugar en el medio de la noche que refleja la oscuridad en sus mentes y en sus corazones". El terrible acto se ha de "condenar en los términos más enérgicos".

La congregación ha solicitado la protección de la policía y por la tarde el martes presentó una denuncia en la comisaría Sendhwa. Los ataques contra los cristianos no son nuevos en el Estado. En la misma noche del pasado martes, de hecho, algunos radicales hindúes han atacado tres iglesias en Indore, la ciudad más grande de Madhya Pradesh.