Líder islámico sobre el Jubileo: junto a los cristianos, reconozco que Dios es el más misericordioso

de Akhtarul Wasey*

El Prof. Akhtarul Wasey es el encargado del gobierno de Delhi en lo referente a las minorías lingüísticas. Comparte con AsiaNews una reflexión sobre el significado del Jubileo de la Misericordia en la relación entre cristianos y musulmanes. “Los fieles musulmanes recitan la oración: En el nombre de Dios, el más generoso, el más misericordioso”. La gratitud por el trabajo de la Iglesia católica, al servicio de los pobres, los marginados, los abandonados.

Nueva Delhi (AsiaNews) – La Misericordia “es un atributo de Dios, y Dios quiere que nosotros seamos misericordiosos los unos con los otros. Yo, como musulmán, vibro junto a mis hermanos y hermanas cristianos en el reconocimiento de que Dios es el más misericordioso”. Quien lo dice a AsiaNews es el Prof. Akhtarul Wasey, encargado de la Comisión para las minorías lingüísticas del gobierno de la India, al comentar el Jubileo de la MIsericordia inaugurado el pasado 8 de diciembre por el Papa Francisco.

El líder musulmán cita la oración islámica “Bismi-llahi ar-Rahmani ar-Rahimi”, que quiere decir: “En el nombre de Dios, el más generoso, el más misericordioso”. Dicha oración recuerda a los fieles de la religión musulmana que han de ser misericordiosos hacia los demás seres humanos.

El Prod. Wasey agradece a la Iglesia católica por su servicio en favor de los pobres, los excluídos, los abandonados. “Estoy seguro -concluye- de que las personas de buena voluntad se unirán a la Iglesia para mejorar las condiciones de vida de las personas”. Traducción al español cargo de AsiaNews.

En la Misericordiae Vultus [la Bula de indicción del Jubileo de la Misericordia – ndr], el Papa Francisco escribió que la Misericordia es “la viga maestra que sostiene la vida de la Iglesia. Todo en su acción pastoral debería estar revestido por la ternura con la que se dirige a los creyentes; nada en su anuncio y en su testimonio hacia el mundo puede carecer de misericordia” (n. 10).

Ciertamente, la misericordia de Dios está en el centro de la vida de la Iglesia. Estoy contento por el hecho de que la Iglesia se reconozca a sí misma a través del fortalecimiento de su servicio, donde quiera que sea, sobre todo en favor de los pobres, de las personas marginadas, y en particular, en el curso de este Año de Misericordia.

Es seguro que la misericordia es un atributo de Dios, y Dios quiere que nosotros seamos misericordiosos los unos con los otros.

Siendo musulmán, sin duda, yo vibro junto a mis hermanos y hermanas cristianos al reconocer que Dios es el más misericordioso. Muchos cristianos habrán escuchado que los musulmanes recitamos una breve oración: “Bismi-llahi ar-Rahmani ar-Rahimi”. La misma es traducida de esta manera: “En el nombre de Dios, el más generoso, el más misericordioso”. Esta oración no sólo recuerda a los musulmanes que Dios es misericordioso, sino que pide a ellos ser misericordiosos hacia los demás seres humanos.

Estoy agradecido por el servicio que la Iglesia presta en favor de las personas discriminadas en la India, en particular por los servicios en el campo de la educación y de la atención médica. La Iglesia no discrimina a nadie, sirve a todos con amor. La Iglesia no olvida a los pobres y a los marginados, sino que por el contrario, reserva a ellos un particular cuidado. Esto es algo que conmueve el corazón.

Creo que la Iglesia en la India podrá explorar nuevas posibilidades de cooperación con muchas otras personas de buena voluntad de las diversas comunidades religiosas, para servir, sobre todo, a los pobres y a los grupos excluidos. Estoy seguro de que las personas de buena voluntad se unirán a la Iglesia para trabajar juntos, a fin de mejorar las condiciones de vida de las personas.

*Encargado de la Comisión para las minorías lingüísticas en la India: ex director del Zakir Husai – Instituto de Estudios Islámicos; ex presidente del Departamento de Estudios Islámicos de la Jamia Millia Islamia, la Universidad Islámica naconal en Nueva Delhi; participó en el 50mo aniversario del PISAI (Pontificio Instituto de Estudios Árabes y de Islamística) en la ciudad de Roma; es uno de los firmantes de la carta abierta “A Common Word between Us and You”, enviada al Papa Benedicto XVI por 138 líderes religiosos musulmanes con el objetivo de promover una mayor comprensión entre las dos religiones.