Los ulema de Indonesia apoyan el boicot a los productos franceses
La dirigencia del MUI se propone enviar un "mensaje fuerte" a Macron, al que califican de "arrogante". Protestas en las calles de Yakarta y Yogyakarta. Pero la campaña no parece destinada a tener mucho efecto en la práctica: el volumen de negocios se reduce y termina afectando más a los comerciantes locales. El Nahdlatul Ulama insiste en fortalecer el diálogo para superar los extremismos opuestos.
Yakarta (AsiaNews) - Los grupos radicales de Indonesia han expresado su apoyo a la campaña internacional, de una parte del mundo islámico, que pide un boicot a los productos y bienes importados de Francia. La iniciativa se inscribe en el contexto de las tensiones internacionales entre París y Ankara, en un choque frontal - que forma parte de una instrumentalización política - entre los "paladines" de la libertad de pensamiento y de sátira contra los "defensores" de la fe musulmana.
A la vanguardia del boicot a los productos franceses está el Consejo Ulema de Indonesia (MUI), que en el pasado ya fue protagonista de diversas iniciativas controvertidas, como el ataque a escuelas católicas o la reacción contra la venta de comida y bebida en las calles durante el Ramadán. "Debemos enviar un mensaje contundente - dice un comunicado difundido por la dirigencia del MUI - a ese arrogante presidente Macron, el jefe francés". La condición que imponen los líderes islámicos para cancelar la iniciativa es que el inquilino del Elíseo pida públicamente disculpas y prohíba la publicación de las caricaturas de Mahoma.
El 2 de noviembre, miles de extremistas islámicos realizaron una manifestación, aunque de manera pacífica, frente a la embajada de Francia en Yakarta. Otras protestas callejeras contra París tuvieron lugar en Yogyakarta, donde también se escucharon consignas y llamamientos al boicot.
En realidad, la campaña contra los productos franceses que ha vuelto a lanzar con fuerza una parte del Islam radical de Indonesia, la nación musulmana más poblada del mundo, no parece que vaya a tener gran impacto en la práctica. De hecho, el volumen de negocios entre París y Yakarta es muy inferior al que tiene con otras naciones occidentales, como Alemania, Estados Unidos o Italia. En total, hay alrededor de 25 bienes y productos franceses, que incluyen algunas marcas de lujo, electrodomésticos, cosméticos y repuestos para automóviles y aviones. Sin embargo, estos son artículos, en su mayoría caros y de lujo, que no tienen una distribución masiva.
Un informe reciente de CNBC muestra que el volumen comercial total entre los dos países en 2018 fue de ,68 mil millones de dólares y en 2019 aumentó a ,8 mil millones. Una cifra sin duda inferior a la correspondiente a Alemania o Italia, que son socios comerciales mucho más sólidos e importantes para Yakarta. El producto más importante son las piezas de repuesto para los Airbus indonesios, que representan el 45% del total.
Es por eso que otros grupos musulmanes más moderados han preferido no centrarse en la campaña de boicot, cuyo efecto es muy limitado. De hecho, son los minoristas - y por lo tanto también los pequeños comerciantes locales - los que sufren más daños como resultado de una iniciativa equivocada en términos y tonos. Se proponen, por el contrario, fortalecer la imagen de Indonesia como una nación "tolerante y hospitalaria" en base a los principios que animan el Islam. Yahya Cholil Staquf, líder de Nahdlatul Ulama, el principal movimiento musulmán moderado local, insiste en reforzar más el diálogo y el intercambio para no caer en los extremismos opuestos: el fundamentalismo religioso y el relativismo.
17/12/2016 13:14