Los que esperan al "Zar Blanco" en Rusia
Según algunas figuras a la sombra de la guerra en Ucrania, el público ocultista ruso y el interés por la literatura esotérica estarían en aumento. Y en las plataformas web locales se están difundiendo coloridas profecías sobre el advenimiento de una nueva figura mitológica que supuestamente "reunificará y elevará a la Santa Rus".
Moscú (AsiaNews) - Con la guerra de Ucrania como telón de fondo, cada vez más rusos recurren a adivinos y nigromantes, sobre todo para buscar a sus familiares desaparecidos en el frente. El público de estos servicios ocultistas se ha multiplicado por 20, y el interés por la literatura esotérica se ha más que duplicado. Los clips de YouTube ofrecen una serie interminable de predicciones, con docenas de vídeos diarios sobre los temas que remueven la conciencia de los rusos, sobre cuándo acabará la guerra y cuál será el destino futuro de Rusia, hasta el Juicio Final.
La profetisa búlgara Baba Vanga, el ilusionista y mentalista polaco-soviético Wolf Messing, Nostradamus y Stalin, Santa Matrona y la beata Pelageja, e incluso el recientemente fallecido político Vladimir Žirinovsky son invocados como "expertos", junto con una plétora de adivinos rúnicos y espíritus del tarot menos conocidos, dispuestos a predecir cualquier cosa al público con tal de recaudar las preciadas sonrisas digitales, o los aún más codiciados donativos.
En este clima de neoespiritualismo sin límites, las profecías coloristas sobre el advenimiento del llamado "Zar Blanco", que va a "reunificar y elevar a la Santa Rus", preparando a toda la humanidad para la "Segunda Venida del Redentor", se extienden cada vez más en las plataformas rusas de Internet. Los partidarios de esta figura mitológica recurren a las escrituras sagradas de diversas religiones, desde la Biblia hasta el Corán y los Upanisads, pero también a las tradiciones sagradas de los Padres de la Iglesia o de escritores místicos, como en la Leyenda de Tsarevič Svetomir del simbolista Vjačeslav Ivanov, hasta películas de ciencia ficción como Matrix y Buratino.
El "adventista y teólogo libre" Oleg Žigankov celebra un "seminario abierto" en Yandex.Dzen, con 135.000 seguidores, en el que describe la misión del zar venidero, que será instalado "directamente por Dios". Será un gran reformador, que en primer lugar pondrá orden en la propia Iglesia Ortodoxa, expulsando a todos los "falsos jerarcas, herejes y belicistas". Con el Zar Blanco "Rusia resucitará de entre los muertos, y el mundo entero se asombrará"; en primer lugar "Siberia se transfigurará, pero esta Rusia no durará mucho antes del Apocalipsis". Citando a santos griegos y rusos, desde León el Sabio hasta Teófanes de Poltava y el monje Abel, Žigankov relee la historia de las dinastías imperiales de los Rajurikides y los Romanov, especificando que el nuevo gobernante restablecerá Rusia "dentro de las fronteras de la Unión Soviética", donde en lugar del sistema comunista habrá "una sociedad similar a las comunas de los primeros cristianos de la Iglesia Apostólica".
Otros "exégetas" del futuro confirman las tesis del teólogo libre, como la popular bloguera Tatiana Arensburg, según la cual el futuro reino también traspasará las fronteras de la URSS, "reuniendo a los pueblos eslavos dispersos por toda la tierra como las tribus de Israel". Tatiana garantiza que el nuevo "líder espiritual dará una nueva interpretación de la doctrina de Cristo, utilizando el intelecto de las nuevas ciencias actuales, para llegar a un tipo de sociedad completamente nuevo". Hace ya tres años, la actriz Maria Šukšina conmocionó al público al anunciar desde el escenario que en 2024, exactamente durante la fiesta de la Natividad de María que los rusos celebran el 11 de septiembre, aparecería el Zar Blanco, según las profecías de los starets ortodoxos.
Algunos creen que la salvación vendrá de la casa de los Romanov según la línea femenina, una figura actualmente oculta a todo el mundo, pero "todo el pueblo ruso la reconocerá inmediatamente con el corazón", asegura Žigankov. Así se reinterpreta el árbol genealógico descendiente del último zar Nicolás II, cuyo asesinato hace más de un siglo por los soviéticos en julio de 1918 se conmemora estos días. ¡El grito Nie molči, Tsaria kliči! ('¡No calles, llama al zar!'), y se advierte a Vladimir Putin: a pesar de todos sus esfuerzos, ni siquiera su guerra bastará para detener el advenimiento del nuevo zar de la Rusia apocalíptica.
03/03/2022 10:00
