Los líderes religiosos birmanos: luchar contra la pobreza para detener la violencia religiosa

de Francis Khoo Thwe

Es la invitación contenida en el documento final de la Conferencia de paz interreligiosas en Yangon. Los líderes de las cinco principales religiones del país pidieron incluso "fortalecer el nivel de educación" y potenciar la identidad nacional " multiconfecional". Es necesario un "frecuentes encuentro" en un marco de "respeto mutuo".

Yangon (AsiaNews) - La pobreza es una de los más "sintomáticas" causas de los conflictos y los líderes religiosos birmanos deben trabajar juntos por el bien y el interés mutuo; al mismo tiempo, debemos fortalecer el nivel educativo para fortalecer la "identidad nacional" en un ambiente "multiconfesional". Dicen los líderes de las cinco principales religiones en Myanmar, en el comunicado final de la Conferencia de paz interreligiosas celebrada a principios de este mes en Yangon. Al evento se unieron 226 participantes, incluyendo funcionarios del gobierno birmano, académicos, líderes religiosos de todo el mundo y más de 200 observadores. "Este diálogo -dicen en la conclusión los firmantes del documento-, es sólo el principio del principio y [...] Debe tomar una correspondencia practica primero que todo en el ámbito local".

El 1 y 2 de octubre se celebró la Conferencia interreligiosa dedicada a la paz, la armonía y la coexistencia pacífica, organizada por el Institute for Global Engagement y el Sitagu International Buddhist Academy (Siba en Yangon. Al evento asistieron líderes budistas, hindúes, cristianos, musulmanes y judíos. Objetivo común, un mayor compromiso con la paz en el país. Se ha prestado especial atención a áreas críticas, incluyendo el estado occidental de Rakhine teatro, desde junio de 2012, de violencia interreligiosa entre budistas y musulmanes Rohingyas. Sin embargo, frente a las buenas intenciones, la situación en la zona occidental del país sigue siendo crítica con continuos incidentes de violencia, con víctimas y heridos.

En una jornada marcada por los ataques y los sospechosos, se vuelve más apremiante y urgente la convocatoria de los líderes religiosos a la paz y la mutua convivencia. Por la Iglesia católica birmana estuvo el arzobispo de Yangon. Charles Bo. El sacerdote pidió que "envíar una fuerte señal a aquellos que quieren plantar las semillas de la discordia" en el país y construir juntos un futuro en Myanmar "está fundada en la justicia, paz y cooperación fraterna".

En el documento final, los líderes religiosos reconocen la necesidad de un "encuentro frecuente" con "respeto mutuo"; paz y la seguridad son dos "factores esenciales", que deberían ayudar a "los religiosos" porque sin ellos "la fe no puede florecer". Otro elemento fundamental para la convivencia es la "seguridad" y un "terreno común" para dar aplicación práctica al ideal de "unidad en la diversidad".

Representantes de las cinco religiones quieren construir "puentes" para implementar "en lo concreto" en el contexto de una sociedad multiétnica y multiconfesional; para hacer esto se debe "involucrar a hombres y mujeres jóvenes", confiando en sus recursos y responsabilidades. Por último, sigue siendo papel "esencial" el de los medios de comunicación, en una "educación moderna" y que responda a los principios de la "moral" y de la virtud.