Los laicos también tendrán derecho a voto en el Sínodo

El Papa aprobó ampliar la participación de los no obispos a miembros de pleno derecho, ya no solo como auditores. El mismo Papa elegirá a 70 representantes del pueblo de Dios para la reunión de octubre a partir de una lista de nombres procedentes de las Iglesias de todos los continentes. El carácter episcopal quedará garantizado por el hecho de que los obispos constituirán el 75% de la Asamblea.

Estos son los cambios sobre la composición del Sínodo que ha querido el Papa Francisco y que hoy ha anunciado oficialmente la Secretaría General del Sínodo. El cambio más importante se refiere a la presencia como miembros de pleno derecho de 70 no obispos representantes de todo el pueblo de Dios (sacerdotes, consagrados y consagradas, diáconos, fieles laicos) de las Iglesias locales. Sustituirán (y ampliarán) lo que hasta ahora era la categoría de auditores, es decir, figuras elegidas directamente por el Papa para participar en los trabajos de los Sínodos, pero sin derecho a voto. Ahora, en cambio, estas 70 figuras serán miembros efectivos de la Asamblea. Seguirán siendo elegidos por el Papa, pero a partir de una lista de 140 personas identificadas (y no elegidas) por las siete Reuniones Internacionales de las Conferencias Episcopales y la Asamblea de Patriarcas de las Iglesias Orientales Católicas. Para Asia, por tanto, la FABC presentará al Pontífice una lista de 20 nombres. En su elección, el 50% deberán ser mujeres y también se valorará la presencia de jóvenes. Para elegirlos "se tendrá en cuenta no sólo su cultura general y prudencia, sino también sus conocimientos, tanto teóricos como prácticos, así como su participación en diversas funciones en el proceso sinodal". A estos "representantes del pueblo de Dios" podrían sumarse otros miembros no obispos del Sínodo nombrados independientemente por el Papa.

Otras dos novedades se refieren a los representantes de las congregaciones religiosas masculinas y femeninas y de los dicasterios de la Curia romana. Los primeros serán cinco religiosas y cinco religiosos pertenecientes a Institutos de Vida Consagrada, elegidos por las respectivas organizaciones que representan a los Superiores y Superioras Generales, y también ellos serán miembros de pleno derecho del Sínodo. En cuanto a los representantes de los dicasterios que participarán, serán aquellos que indique el Papa.

Todos los miembros no obispos se unirán a los obispos elegidos por cada Conferencia Episcopal, cuyo número varía en función del número de obispos y diócesis. La decisión de conceder también el derecho de voto a los no obispos -tomada por el papa Francisco- confirma el método de participación de todo el pueblo de Dios recomendado por el pontífice para el camino sinodal. Pero como especifica una nota emitida por el Vaticano, esto no quiere socavar la naturaleza episcopal del Sínodo: por eso el número de no obispos seguirá siendo inferior al 25% de la composición de la Asamblea. "Esta decisión -explicó la Secretaría General del Sínodo- refuerza la solidez del proceso en su conjunto, incorporando a la Asamblea la memoria viva de la fase preparatoria, a través de la presencia de algunos de los que fueron protagonistas, restaurando así la imagen de una Iglesia-pueblo de Dios, fundada en la relación constitutiva entre sacerdocio común y sacerdocio ministerial, y dando visibilidad a la relación circular entre la función profética del Pueblo de Dios y la de discernimiento de los pastores".