Los católicos tailandeses están de fiesta: llegó el Papa Francisco (Videos-Fotos)
Centenares de fieles han esperado al pontífice fuera del aeropuerto y en la nunciatura. La población budista muestra tímidas señales de interés hacia la visita apostólica. Joven católico: “Para una gran parte la sociedad, el catolicismo es sinónimo de educación y escuelas. Pero el Papa llevará también la luz sobre el gran compromiso social de la comunidad”. De nuestro enviado.
Bangkok (AsiaNews) – Papa Francisco llegó esta mañana a Bangkok para una visita de tres días (20-23 noviembre). Tailandia es la primera etapa de un viaje apostólico, el 32do del pontífice argentino, que terminará en Japón (23-26 novembre). El avión papal tocó tierra pocos minutos después de las 12, en la terminal militar de aeropuerto Don Muang. REcibe al Papa también sor Ana Rosa Sivori, prima del Papa. La misionera d las hijas de María Auxiliadora, de 77 años, desarrolla su obra en Tailandia desde hace 54 años y le hará de intérprete en algunos de los encuentros oficiales.
La pequeña comunidad católica tailandesa está emocionada: centenares de personas de fiesta esperaron al Papa fuera del aeropuerto (Foto); una multitud lo saludó fuera de nunciatura apostólica (Foto-Video), donde el pontífice se hospedará en estos días. Esta mañana, el resto de la población (budista es cerca del 95%) mostraba tímidas señales de interés por un evento que en las pasadas semanas había encontrado poca resonancia en los medios nacionales. Las autoridades dispusieron severos controles de seguridad y del tráfico en el centro de la capital, que pusieron a dura prueba al ya congestionado tráfico. Son 6.500 los policías desplazados en Bangkok y Nakhon Pathom, donde tendrán lugar los 8 encuentros oficiales de la visita.
Ya desde las primeras horas de la mañana, las autoridades prohibieron el acceso a la parroquia de St. Louis, entre la nunciatura y el homónimo hospital, donde mañana el pontífice visitará a los enfermos y discapacitados. Más de 10 mil personas serán recibidas en los jardines de la iglesia. Sacerdots, parroquianos y voluntarios están trabajando en los últimos preparativos relacionados con su acogida. Entre los más activos estaban Saowalak Jeangchareon y Jordan Delos Santos (Foto). Éstos son 2 docentes de la escuelas de St. Louis, donde los niños católicos son sólo 20-30 sobre 600 estudiantes. “Para nosotros- declara la primera-son días realmente importantes y comprometedores, pero la felicidad con la cual trabajamos no nos hace sentir el cansancio. La visita del Papa lleva a todos nosotros católicos a ser mejores. En estas horas, siempre más personas nos piden que les expliquemos a ellos en qué consiste nuestra fe. En Tailandia, no todos saben quién es el S. Padre. Los niños que tenemos en el jardín de infantes me hicieron cantidades de preguntas. Me preguntaban: ‘Pero este Papa, ¿viene para retarnos?. ¡Ciertamente que no!’, respondía, explicando que el pontífice viene aquí para traer paz y amor”.
Jordan Delos Santos se transfirió de Filipinas a Bangkok poco más de hace 2 años. Ahora enseña inglés en la escuela St. Louis. “Es la primera vez que tengo la posibilidad de ver al Papa- afirma. Para mí es una bendición. El Papa visita Tailandia y viene a la escuela en la cual desde hace sólo un año yo trabajo, ¡un inmigrado filipino! Para los cristianos de Asia tener el privilegio de recibir al Santo Padre. A alguno esto le sucede sólo una vez en la vida. Me siento afortunado y honrado”. “Los católicos tailandeses- prosigue Delos Santos- están entusiasmados, pero el resto del país no es muy consciente de lo que está sucediendo. Los budistas aceptan y respetan a cada religión, pero si uno se mira alrededor es posible intuir que la vida continúa como si nada estuviese sucediendo. La llegad del Papa no suscitó una euforia general como en otras naciones. Pero este es un poco el espíritu de los tailandeses, que reconocen la importancia de tales eventos, pero no se dejan llevar mucho. Tailandia es un país único. El budismo s más que una religión, es un modo de vivir. Por esto, la mayor parte de la población mira al viaje del Papa como días “afortunados’ y no de particular fiesta”.
Mientras tanto, a un par de Km de la parroquia de St. Louis, dentro de la catedral de la Asunción (Foto) estaba llena de visitadores y peregrinos. Al otro lado de la plaza, el Centro misionero (Foto) estuvo abarrotado de fieles llegados para retirar los billetes para participar en la misa de mañana por la tarde en el Estadio nacional. Aquí también, era notable la contribución dada por los jóvenes voluntarios. Uno de éstos es Francisco Phongthep Kijbamroong (Foto), de 32 años y coordinador de los jóvenes católicos para la arquidiócesis de Bangkok. “Estamos todos contentos y trabajamos para que todo se desarrolle lo mejor posible”, afirma. “Trabajé para esta visita 12 horas sobre 24, también en los días feriados- continúa-. Hubo veces que dormí 3-4 horas por noche. En varias ocasiones me sentí impotente: en esos momentos me decía: “Hice lo que puedo, pero puedo hacerlo. Pero. luego iba a la iglesia, me confesaba y recogido en oración decía: ‘Señor, haz que todo salga bien’. Para gran parte de la población tailandesa, el catolicismo es sinónimo de educación y escuelas, desde el momento que los institutos católicos son los mejores por la calidad de la enseñanza. Pero la visita del Papa sacará a la luz también el gran compromiso social de la comunidad, profuso a través de tantas organizaciones”.
