Los católicos de San Petersburgo quieren reactivar un gran centro de caridad
Un edificio histórico de la ciudad se convertiría en la sede local de Cáritas. El impulsor de la iniciativa es el obispo auxiliar, mons. Nikolái Dubinin. En sus orígenes, el lugar se utilizó como refugio para los católicos sin techo; tras ser confiscado en la era soviética, se siguió utilizando con fines benéficos. La nueva sede ayudaría a numerosos centros de asistencia católicos en la Rusia europea, que todavía suelen lidiar con condiciones legales y logísticas bastante precarias.
San Petersburgo (AsiaNews) - Los católicos de la "capital del norte" quieren reactivar un gran centro de caridad en la isla Vasilievski Ostrov, en el centro de la ciudad. La información fue difundida por Kommersant Sankt-Peterburg. Se trata de una iniciativa de la diócesis de Rusia central -con sede en Moscú- impulsada por el obispo auxiliar, mons. Nikolaj Dubinin, el primer obispo católico de nacionalidad rusa, actualmente a cargo del área pastoral de San Petersburgo.
Los católicos presentaron al Concejo municipal la solicitud de restitución gratuita de un edificio del siglo XIX, situado en el área 14 de Vasilevski. En este momento el complejo está ocupado por dos centros heredados de la época soviética, dedicados a la rehabilitación de adicciones y al apoyo a las familias. La iniciativa pretende transformarlo en el centro local de Cáritas con varios propósitos y proyectos de gran alcance.
Como explica el joven obispo franciscano, “después de la restitución podremos destinar los locales acorde a los estatutos de Caritas, para fines asistenciales y sociales, teniendo en cuenta las características históricas del edificio, que ha sido sede de la caridad católica por más de un siglo". Dubinin agregó que "se prestará atención a las necesidades y condiciones actuales de todos los ciudadanos de San Petersburgo, católicos y no católicos".
El clérigo recordó que el edificio se utilizó originalmente como refugio para los católicos sin techo. En 1857 también se instaló un hogar para niñas huérfanas y en 1859 los administradores habían aprobado el estatuto de "Hogar para los pobres de confesión católica". El centro fue administrado por un comité especial, animado por los feligreses de la iglesia de Santa Catalina, la joya arquitectónica de los dominicanos en Nevsky, la calle principal de la capital del Imperio Ruso en aquella época. “Este fue el primer centro caritativo oficial de los católicos rusos”, dijo el obispo auxiliar.
La solicitud de restitución solo fue posible recientemente, gracias a la ampliación de las normas sobre edificios eclesiásticos históricos, modificada en 2021. En el nuevo texto de la normativa, se prioriza la restitución de bienes destinados a la asistencia material y espiritual de la población, como hogares para huérfanos y comedores populares. Estos centros eran habituales en las iglesias ortodoxas de San Petersburgo, donde acudía gente de toda Rusia en busca de trabajo y ayuda.
La primera solicitud de los católicos se presentó en marzo de este año, pero las autoridades consideraron que la documentación era insuficiente. Luego de un análisis minucioso, la solicitud fue aceptada el 26 de agosto, y se espera una decisión positiva por parte del responsable municipal, quien informó que el inmueble está libre de impedimentos legales o económicos.
El gran edificio de tres plantas tiene una superficie de 350 metros cuadrados no destinados a vivienda. Actualmente en el lugar funciona un restaurante, varias oficinas y algunos apartamentos podrían quedar libres. Sin embargo, los establecimientos no serán desalojados de inmediato, sino que se procederá a trasladarlos de forma gradual (en un plazo de seis años) hasta conseguir instalaciones adecuadas, evitando perjudicar a las personas físicas y jurídicas. En este sentido, Dubinin aporta tranquilidad sobre los acuerdos: “A los actuales usufructuarios se les ofrecerán alternativas más adecuadas y cómodas, este es un edificio histórico y es necesario hacer obras y reformas”.
El decanato del noroeste de la diócesis, a cargo de mons. Dubinin, cuenta con unas treinta parroquias, de un total de 67 incluida la zona central de Moscú, más unas veinte en el enclave báltico de Kaliningrado, el decanato católico noreste. La nueva Caritas Petersburgo ayudaría a numerosos centros de asistencia que fueron abiertos por católicos en la Rusia europea -muchos de ellos, en condiciones legales y logísticas bastante precarias.
07/10/2020 10:42
31/07/2020 11:31