Las escuelas católicas francófonas como alternativa al éxodo de jóvenes de Oriente Medio

de Fady Noun

El fin de semana se llevó a cabo en Amán el cuarto simposio, al que asistieron más de 250 representantes de distintos países de la región. Los fondos recaudados por L'Œuvre d'Orient han permitido la creación de 211 instituciones y proyectos educativos. Hay 400.000 alumnos repartidos en 550 escuelas, que constituyen un "factor de estabilidad". La misión es ofrecer una formación de excelencia y oportunidades profesionales.

Amán (AsiaNews) - Organizado por L'Œuvre d'Orient, se llevó a cabo el 16 y 17 de junio, en el Terra Sancta College de Amán, Jordania, el cuarto simposio de escuelas cristianas de habla francesa en Medio Oriente. Asistieron directores de escuelas del Líbano, Siria, Tierra Santa, Turquía y Jordania, así como representantes y secretarios generales de escuelas católicas y muchos jóvenes de instituciones católicas francófonas que han decidido permanecer en sus países de origen en vez de optar por la migración como otros de su edad.

Al igual que los precedentes en París en 2014 y 2016 y posteriormente en Beirut en 2018, el encuentro permitió mejorar la coordinación entre las diferentes realidades de la región. Las ayudas concedidas se destinan generalmente a la renovación de las escuelas, el salario de los profesores, el apoyo al transporte escolar de los niños y al material escolar y didáctico, incluyendo los equipos informáticos. Desde 2020 este esfuerzo ha sido financiado en partes iguales por el gobierno francés y L'Œuvre d'Orient, un total de 8,2 millones de euros que ha permitido sostener 211 escuelas y proyectos.

El simposio de este año reunió a 250 participantes: religiosas y religiosos, sacerdotes y laicos cuya misión es educar a los jóvenes del norte de África y Oriente Medio (Egipto, Irak, Israel, Jordania, Líbano, Marruecos, Palestina, Siria, Túnez y Turquía ). Son cerca de 400.000 alumnos en 550 escuelas de habla francesa: 329 en el Líbano, 170 en Egipto, 35 en Jordania y Tierra Santa, seis en Irak y ocho en Siria.

Este año el tema de la conferencia fue "El futuro de los jóvenes en las escuelas cristianas en Medio Oriente" y destacó en particular el importante papel que desempeñan las escuelas cristianas de habla francesa para garantizar la estabilidad de las poblaciones en las que se encuentran. Con jóvenes cada vez más tentados por la perspectiva de la emigración, la misión de las escuelas cristianas de habla francesa es precisamente ofrecer una formación de excelencia y oportunidades profesionales a nivel local.

El embajador francés en Jordania, Alexis Le Cour Grandmaison, leyó un mensaje del jefe de Estado francés, Emmanuel Macron: "Francia tiene un compromiso de larga data con los cristianos de Oriente... Este compromiso a largo plazo -sigue diciendo el texto- ha conservado toda su vitalidad e ímpetu. Lo he visto en el Líbano, mientras el país continúa hundiéndose en una crisis sin precedentes. Lo he visto en Irak, donde Œuvre d'Orient está haciendo un trabajo notable para apoyar a las comunidades cristianas y las minorías religiosas, que han sufrido especialmente bajo el yugo de Daesh [acrónimo árabe de Estado Islámico]. También podría citar la calidad, fuerza y utilidad de su trabajo en otros países de la región, desde Armenia hasta Egipto”, afirma el presidente, para quien la “diversidad” es “inseparable de la identidad, de la historia y la cultura” de Oriente Medio. Y precisamente esta diversidad es “una condición esencial -concluye Macron- para que sigan creciendo en dirección a la paz, la estabilidad, la tolerancia y la prosperidad”.

Haifa Hajjar Najjar, Ministro de Cultura jordano, intervino al comienzo de los trabajos y subrayó que Amán “no podría haber existido, ni resistido, sin este trabajo, sin esta cooperación que estamos haciendo junto a ustedes, las escuelas cristianas [.. .]. Gracias a las escuelas cristianas y a los cristianos de Oriente Medio hoy podemos convivir pacíficamente". Armelle Millcent, responsable de comunicación de L'Œuvre d'Orient, recordó que las escuelas francófonas son "terreno fértil para mejorar las relaciones interreligiosas e intercomunitarias y son garantía del pluralismo cultural y confesional". Al finalizar, el presidente de la institución católica, monseñor Pascal Gollnisch se dirigió a la asamblea preguntando “¿qué tipo de sociedad queremos para los jóvenes de Oriente Medio? Los cristianos - concluyó - deben ser capaces de desempeñar un papel activo en estas sociedades. Debemos superar las dificultades. La fuerza de los cristianos de Oriente Medio es ponerse al servicio de los pueblos en nombre del Evangelio".