La ‘paz fácil’ de Trump no convence a los palestinos
El presidente de los EEUU se encuentra con el presidente de la Autoridad nacional palestina, Mahamud Abbas. Bernard Sabella, representante católico de Fath y el activista Adel Misk comentan: demasiadas ambigüedades de Washington y la inflexibilidad de Israel sobre puntos importantes como los prófugos y los asentamientos. Abbas habla de esperanza, pero ellos ven “una calle sin salida”. El “caramelo” para los palestinos.
Jerusalén (Asia News)- La promesa de Donald Trump de encontrar con facilidad un acuerdo de paz entre Israel y Palestina fue recibida por muchos palestinos con irónica desilusión. Lo narran a AsiaNews, Bernardo Saballa, católico, representante de Fatah por Jerusalén y secretario ejecutivo del servicio para los refugiados palestinos del Consejo de las Iglesias de Oriente Medio y Adel Misk, activista. Para Sabella, una paz simple es posible sólo a caro precio para los palestinos; para Misk la ausencia de una posición clara de los EEUU sobre la solución de los dos Estados representa un límite a cualquier proceso de paz.
Ayer Trump hospedó al presidente de la Autoridad palestina (ANP), Mahmoud Abbas en la Casa Blanca y prometió hacer “todo lo necesario” para llegar a un acuerdo de paz, para el cual tratará de ser “mediador, árbitro y facilitador”.
Durante el encuentro, Trump habría pedido a Abbas la interrupción de los pagos a las familias de los detenidos palestinos en las cárceles israelíes, que Israel considera “terroristas”. No hay ninguna indicación que Abbas haya dado su consentimiento a este pedido, que sería mal aceptada por los palestinos, sobre todo en consideración de la huelga de hambre todavía en curso de los detenidos, hoy están en el 18° día.
Por su parte, Abbas reafirmó los pedidos palestinos: un Estado palestino con Jerusalén este como capital dentro de los confines de 1967 y la finalización de la ocupación.
Al final de la declaración conjunta, Abbas dijo en inglés al presidente de los EEUU: “Contigo, señor Presidente, ahora tenemos esperanza”. Pero muchos palestinos no parecen estar de acuerdo.
“No estamos demasiado excitados”, afirma Sabella. “Considerando la actual situación, con los problemas que hay en Europa, la administración americana, los esfuerzos de Israel para hacernos parecer como agresores, sobre lo cual parece estar de acuerdo… no soy muy optimista”.
“No pienso habrá un cambio radical. Obama y Kerry habían intentado, si bien también ellos financiando a Israel. Dudo que las cosas cambiarán con Trump que tiene muchos consejeros pro-Israel y que se llegará a este “acuerdo del siglo”.
Él comenta que una “paz simple” se podría tener sólo si los palestinos decidiesen aceptar la ocupación; renunciar a Jerusalén este como capital y la vuelta de los prófugos; reconocer al Estado israelí y aceptarlo como ‘hebreo’. Y agrega irónico: “No me parece que la República islámica de Irán haya pedido a los Estados europeos de reconocerlo como país islámico”.
Abbas come presidente del ANP y palestino no podrá jamás aceptar similares condiciones, también considerando las presiones internas “de Hamas, y no sólo. Quizás es demasiado decir que la situación “hierve”, pero aquí las cosas son difíciles”.
Haciendo una comparación con un buen acuerdo de negocios, Sabella afirma: “se necesitan de todos los pedazos, también psicológicos y emotivos”. “No puede haber paz si no consideras todo”. “Nosotros hemos hecho mucho camino y reconocido a Israel, pero ellos quieren siempre más. Hay tantos problemas y creo que una solución simplicista de parte de Washington no tendría “mercado” para la mayoría de los palestinos. Para mí es una calle sin salida”.
Por su parte, Misk afirma que la promesa de Trump es también débil porque su posición es ambigua. Sea él como Abbas han compartido declaraciones “breves” y “limitadas”: los que demuestra que no “se llegó a un gran acuerdo”.
Trump no ha hablado de dos Estados, dijo que quiere ser mediador para resolver el problema, pero sin decir cómo. No ha hablado de colonias, que continúan creciendo. Ni habló de Jerusalén”.
Él continúa: “No habiendo hablado con claridad, sin un calendario o proyecto real, me parece-nos parece- que no haya sido un encuentro nada más que formal. Israel no tiene intención de dar pasos atrás, hay tantas voces que van contra la solución de los dos Estados. Sin una posición clara, los EEUU apoyan la inflexibilidad de Israel”.
“También la administración precedente no obtuvo nada-explica el activista- pero al menos hablaban con claridad de dos Estados. Esta administración no habla, ni siquiera de un encuentro con Netanyahu. Tomó la ‘posición de la no-posición”.
Para Misk, las declaraciones de ayer no son más que un “caramelo para los palestinos”.
18/01/2018 12:17