La reunificación familiar en Corea, Seúl ofrece a Pyongyang "estabilizar las reuniones"

El presidente de Sur recordó a la contraparte que " el tiempo pasa para todos" y llamó a una agenda regular para permitir que las familias separadas por la guerra puedan reunirse de nuevo antes de que sea demasiado tarde. El Norte no responde por ahora, pero lanza misiles de corto alcance durante ejercicios militares entre el Sur y Estados Unidos.

Seúl (AsiaNews / Agencias ) - El gobierno de Corea del Sur ha propuesto a la otra parte de "estabilizar de forma regular" la reunificación de las familias separadas por la guerra de Corea que dividió en dos la península. Hablando durante las celebraciones por la independencia de Corea del dominio japonés - que tuvo lugar el 1 de marzo 1919 - el presidente Park Geun -hye. dijo: "Incluso en el Norte, hay miembros de la familia que han sufrido la separación. Estoy convencido que Pyongyang debe actuar para evitar a aquellas personas dolor y angustia. El tiempo pasa para todos".

La reunificación familiar se inició por primera vez en 1985. Representan un "gesto de buena voluntad" por parte de los gobiernos de Seúl y Pyongyang, que, sin embargo, nunca han sido capaces de hacerlo institucional. Para participar, los ciudadanos que puedan demostrar que tienen un pariente que vive en el otro lado de la frontera deben registrarse en el Ministerio de Unificación de Corea del Sur: al principio fueron 130.000. En la actualidad hay poco más de 71.000 con vida. Entre altas y bajas, la última ronda de reuniones se llevaron a cabo del 20 al 25 de febrero de 2014.

Por el momento, el gobierno de Corea del Norte no ha respondido a la propuesta de la Park. Según varios analistas el régimen dirigido por Kim Jong-un se resiste a aumentar el número de reuniones entre miembros de familias separadas porque teme que la influencia del estilo de vida y un mayor número de noticias de Corea del Sur sobre la vida en un país democrático podría aflojar su control del poder.

La llamada de Park representa un avance en las conversaciones entre las dos Coreas. Desde su elección, el presidente - líder del Partido Conservador - ha dejado en claro que el Sur "continuará sus propios programas" militares y económicos "a pesar de las amenazas del Norte". Justo esta semana son los ejercicios militares anuales entre Corea del Sur y Estados Unidos, que Pyongyang ha llamado en repetidas ocasiones que es una "provocación".

Durante estos "juegos de guerra", el ejército del Norte lanzó seis misiles de corto alcance en sus aguas territoriales como "un experimento en la guerra". Washington ha pedido al régimen estalinista "poner fin a estas actividades hostiles". Pero varios expertos aseguran que el lanzamiento "no representan una amenaza real. Son más una manera de afirmar su posición".