La oposición anti-Assad no participará en los coloquios de paz en Astaná

En la capital kazaja, el gobierno y los rebeldes debían discutir el reforzamiento del cese del fuego y el intercambio de prisioneros. Líder de la oposición: el boicot es a raíz de las “promesas no mantenidas” por el gobierno en lo que respecta a la tregua. En Homs, capital de la revolución, los grupos rebeldes llegan a un acuerdo para proceder a la evacuación.

Astaná (AsiaNews/Agencias) – Las facciones rebeldes de Siria no participarán en el nuevo round de negociaciones con exponentes del gobierno, programadas en la capital de Kazajistán. El tercer encuentro de Astaná, con la mediación de Turquía, Rusia e Irán, debía iniciarse hoy con el objetivo de reforzar el cese de fuego a escala nacional que fuera suscripto a fines de diciembre. Otro tema que podía formar parte de la agenda era el intercambio de detenidos y de personas secuestradas.

En la tarde de ayer, el anuncio fue dado por el vocero de la delegación que reúne a las diferentes facciones que componen la nutrida galaxia de la oposición. “Los grupos rebeldes han decidido no presentarse en Astaná”, afirmó Osama Abu Zeid, para quien el boicot estaría motivado por las “promesas no mantenidas” por el gobierno en lo que respecta a la tregua.

Ahmad Othman, comandante del grupo rebelde Sultan Murad, sostenido por Ankara, agrega que “no hay una puesta en acto plena” de las disposiciones relativas al cese de fuego. “El régimen y las milicias –prosigue- continúan bombardeando, causando desplazados, promoviendo los asedios”.

Ayer, la TV estatal siria resaltó que la delegación del gobierno, encabezada por el representante de Damasco en la ONU, Bashar al-Jaafari, ya había hecho su arribo a la capital de Kazajistán para participar en los encuentros. También están presentes representantes de Rusia, además de representantes de las Naciones Unidas que han llegado a Astaná en calidad de observadores.

La próxima sesión de encuentros en Ginebra mediada por la ONU se iniciará el próximo 23 de marzo y se enfocará en cuatro temas principales: la forma de gobierno, un nuevo proyecto de Constitución, las elecciones y la lucha contra el terrorismo. Según lo que refiere el enviado especial Staffan De Mistura, incluso podría comenzarse a hablar de reconstrucción.

Desde que se inició el conflicto sirio en marzo de 2011, ya han muerto 320.000 personas, ha habido millones de desplazados, en el contexto de la emergencia humanitaria más grave desde la Segunda Guerra mundial.

En tanto, en el frente del conflicto, grupos rebeldes han acordado la evacuación del último enclave en Homs, tal como ocurrió tiempo atrás en Alepo. El gobernador de la ciudad, Talal Barrazi, ha afirmado que el vaciamiento de al-Wair es parte de un acuerdo con los líderes de la comunidad y durará de seis a ocho semanas.

A los rebeldes les será permitido evacuar el lugar junto a sus familias; los combatientes se replegarán hacia el territorio situado al norte del país, que están bajo el control de grupos de oposición que luchan contra el presidente Bashar al-Assad. Al-Wair, distrito de la periferia occidental de Homs – considerada la “capital de la revolución”- en la cual viven 75.000 personas, está sitiada por el gobierno desde el 2013.

Según lo que refiere el sitio Orient News, cercano a la oposición, los rebeldes debieran replegarse hacia Jablus, una pequeña localidad situada sobre la frontera con Turquía, que fue arrancada al Estado islámico en agosto pasado. (SI).