La felicidad de 31 catecúmenos por el bautismo en la fiesta de la Trinidad
Mons. Joseph Nguyễn Năng, arzobispo de Ho Chi Minh City :“Después de un largo recorrido, reciben el Bautismo. No son ustedes los que han buscado a Dios, sino Dios que los buscaba desde hacía mucho tiempo”.
Ho Chi Minh City, (AsiaNews) - En la historia del desarrollo del catolicismo en Vietnam, los miembros de la familia han tenido un rol importante en el llevar la Buena Noticia a los otros.
El arzobispo Joseph Nguyễn Năng (en la foto) afirmó que la finalidad del matrimonio católico es vivir en una familia amorosa. Agregó creer también que los miembros de la familia deberían mostrar la alegría de los católicos y desde aquí presentar a Dios a los otros.
En el día de la fiesta de la Santísima Trinidad, el 7 de junio, la diócesis de Saigón confirió el sacramento del Bautismo a 31 hermanos y hermanas en la catedral de Notre Dame de Saigón.
La misa tuvo lugar en comunión y santidad con la presencia y la predicación del arzobispo Nguyễn Năng. Además, hubo participación en la “Fiesta del sacrificio” de 4 sacerdotes con cerca de 200 fieles y parientes de estos nuevos catecúmenos en la misa de la Santa Trinidad.
En la homilía el arzobispo Joseph, dijo a los catecúmenos que “Hoy es la fiesta de la Santísima Trinidad. Éste es el vértice del catolicismo. En Vietnam a menudo sentimos “no nào cũng dậy ăn ngay ở lành" (Cada religión nos enseña a hacer las cosas justas y vivir una vida pacífica). También el catolicismo es lo mismo”.
“Pero el catolicismo no sólo nos enseña a hacer las cosas justas, pero nos educa también a conocer a la Santísima Trinidad. No sólo mantenemos una buena religión o cuidamos nuestra religión para ir al Paraíso, pero es importante entrar en la religión para unirnos a la comunidad católica y a la familia de la Santísima Trinidad”, explicó el arzobispo Joseph.
“Por cuatro meses, ustedes han estudiado el catecismo, aprendiendo a conocer el catolicismo. Por lo tanto han participado en la comunidad cristiana. Hoy, estamos muy felices de darles la bienvenida a la familia de la Iglesia. En esta familia tenemos cardenales, obispos, sacerdotes, religiosos y parroquianos”.
“Desde hoy-agregó aún- están unidos a la Gran familia de la Iglesia. Esta familia que es la imagen de la Santísima Trinidad. Estamos en esta familia para construir un nuevo mundo: "un mundo de amor”. “Después de un largo recorrido, reciben el Bautismo. No son ustedes los que han buscado a Dios, es Dios que los estaba buscando desde hacía mucho tiempo. Quizás Dios usa una oportunidad; por ejemplo, a veces podrían ver un película o leer un libro o ver a un cura. Quizás tu enseñante sea católico o hayas encontrado un cónyuge católico, etc”. “Gracias a estas oportunidades, decidieron unirse a la familia de la Iglesia y vivir en el amor. Nos alegramos por ustedes, porque el Señor los invitó”.
Al final de la misa, un representante de los 31 catecúmenos declaró: “En el pasado sacerdotes y religiosas de la catedral nos han acompañado y compartido la enseñanza con nosotros. A través de las lecciones de catecismo y obras de beneficencia de padres y religiosas, reconocemos que Dios es amor. Nos ama siempre. Por lo tanto creemos y seguimos al Señor. Agradecemos al arzobispo Joseph, sacerdotes, religiosos y religiosas, padrinos y laicos que han rezado en silencio por nosotros en el día bendito de hoy”.
En la realidad de hoy, muchas familias católicas dieron testimonio a los no católicos que vinieron al catolicismo. Por este motivo es la religión del amor.
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