La expulsión de Daesh hacia los montes de Jurud marca el inicio del fin de la guerra en Siria

de Pierre Balanian

El ejército libanés- y de la otra parte de la frontera, el ejército sirio y Hezbolá-destruyeron las bases del Estado islámico cortando las vías de comunicación y de aprovisionamiento en Siria. El ejército libanés alabado como el liberador de la población. El respeto de Hezbolá por los prisioneros, yihadistas casi por casualidad.

Beirut (AsiaNews)- Los combatientes de Daesh están ya atrapados: el ejército libanés inició a avanzar en las zonas montañosas de Jurud, no lejos de la frontera con Siria. Del otro lado de la frontera se está desarrollando en contemporánea un ataque del ejército sirio apoyado por los combatientes de Hezbolá. En la jornada de ayer la artillería del ejército libanés atacó las bases de los terroristas islámicos de Daesh, causando muertos y heridos. Los artificieros han avanzado bonificando el terreno de las minas colocadas antes del retiro de los combatientes a Kehouf, el último refugio que les queda a ellos en Líbano.

Delante de la imposibilidad de fuga los combatientes de Daesh han pedido un cese del fuego que el comando militar rechazó conceder antes de obtener informaciones inherentes a los rehenes raptados en Ersal y aún en manos de Daesh.

En un comunicado difundido ayer por la oficina del Jefe de estado mayor libanés se habló de “un suceso veloz en la ejecución de las dos fases de la operación. ‘Fajr el Jurud (Alba de los Jurud)’ y que el ejército se prepara a pasar a la tercera y última fase”

Con la liberación de la frontera siria con Jordania, con Irak y ahora con Líbano, se cierran al terrorismo islámico las vías de aprovisionamiento en hombres y medios. Su debilitación marca el inicio del fin de la guerra en Siria.

Siempre ayer las tropas sirias con los Hezbolá libaneses lograron liberar Kornet Shaabet Ekko en la frontera con Líbano, en el curso de la operación. “Si vuelven atrás”, una acción militar conjunta de ambas partes de la frontera que ve una colaboración de hecho entre Damasco y Beirut, por primera vez desde el inicio de la guerra en Siria. Fuentes locales refieren que los ataques realizados por parte de la aviación militar siria-más de 20- contra bases en la altura de Halima Kara en la zona siria de los Jurud de Kalamun occidental. Entre las zonas liberadas a Daesh están las alturas de Shaabat al Duab, Shaabat Beit, Shukr, además de dos pasos importantes para Daesh; los de Shams Tem el Mal y Kosseirah. Otras noticias procedentes de la zona hablaban de un avance del ejército sirio a lo largo del valle de Al Shahut en el oeste.

La prensa libanesa reportó con orgullo el comportamiento de los combatientes de Hezbolá hacia los prisioneros de guerra de Daesh a los cuales, tratándolos con dignidad, decían: “Vuestro honor no será violado; vuestras vidas son tan válidas como las nuestras; nosotros estamos contra las injusticias”.

ERn una nota emanada ayer por la embajada de EEUU en Beirut se lee que Washington está orgullosa de la acción del ejército libanés que considera como “un aliado en la lucha contra el terrorismo”.

El ejército libanés fue recibido con mucho calor por la población local y la TV libanés transmitió las imágenes de mujeres de la zona de Al Kaa y Ras Baalbeck que se unieron para cocinar buenas comidas a los soldados en el frente, mientras que una asociación de jóvenes fue creada disponiendo jóvenes a lo largo del trayecto hacia el frente, para ofrecer botellas de agua y fruta a los soldados que van hacia las zonas de combate.

Hay que notar que los combates de Daesh en esta zona son diversos de los de Raqqa, Deir Ezzor o Mosul: se trata de combatientes de varias facciones en la miríada de milicianos en nombre del Islam que después de la fuga de Al Qusayr (donde en 2013 se realizó una batalla ganada por el ejército sirio, Ndr), han elegido adherir a Daesh en la esperanza que éste viniese en su ayuda.