La UE sanciona a Minsk. Protasevich 'confiesa' por video

Prohíben a las aerolíneas bielorrusas sobrevolar los cielos europeos y hacer escalas en los 27 países de la Unión. El periodista arrestado presenta el rostro cubierto de moretones y afirma que ha "confesado". El padre del joven cree que lo están torturando. Su trabajo de apoyo a la oposición se considera un acto de "terrorismo". Svetlana Tikhanovskaja pide su liberación inmediata.

Bruselas (AsiaNews) - La Unión Europea (UE) decidió anoche cerrar su espacio aéreo y escalas a empresas bielorrusas, luego de que las autoridades de Minsk obligaron a un avión a desviarse y aterrizar para arrestar a un periodista disidente.

La UE ha pedido a las aerolíneas europeas de los 27 Estados que no sobrevuelen Bielorrusia y ha prometido nuevas sanciones. El presidente Alexandr Lukashenko, quien ganó en agosto del año pasado unas elecciones que muchos denuncian como manipuladas, ya está sancionado junto con algunos miembros de su gobierno.

El acto de "piratería" o "terrorismo de Estado", como lo definen muchos gobiernos occidentales, se utilizó para detener al periodista y activista Roman Protasevich, de 26 años, militante de larga data de la oposición a la dictadura de Lukashenko, en el poder desde 1994. Su compañera Sofia Sapega también fue arrestada con Protasevich.

Con el rostro cubierto de moretones, Protasevich apareció anoche en un video en la televisión estatal. Dijo que estaba en la penitenciaría número 1 de Minsk. “El personal se comporta apropiadamente conmigo - dijo - respetando la ley. Sigo colaborando con los investigadores y he decidido confesar sobre la organización de disturbios masivos”.

El padre de Roman, Dmitri Protasevich, declaró a la BBC que temía que estuvieran torturando a su hijo.

Acusado de organizar "disturbios masivos", "alterar el orden público" e "incitar a la enemistad social", el joven enfrenta una pena de 15 años de prisión. Si es acusado de terrorismo, podría ser condenado a muerte.

Svetlana Tikhanovskaja, líder de la oposición en el exilio en Lituania, quien reclama el triunfo en las elecciones presidenciales, dijo que el joven está sometido a "presiones físicas y morales" y exigió su inmediata liberación, junto con la de todos los presos políticos.

El periodista trabaja con la oposición desde que era adolescente. Las primeras manifestaciones en las que participó fueron en 2012, a los 17 años. Trabajó como fotógrafo en varios medios de comunicación bielorrusos. En 2017 ganó la beca Vaclav Havel para aspirantes a periodistas independientes. En 2020 vivió como exiliado en Polonia y Lituania. Desde allí, a través de la plataforma web Nexta, apoyó al movimiento de oposición. En su perfil de Twitter escribió: “La KGB de Bielorrusia me puso en la lista de terroristas. Ahora mi nombre está en la misma lista que los miembros de Daech”