La UE corteja a los Estados de Asia Central
El jefe de la diplomacia europea, Borrell, se reunió con los líderes regionales en Samarcanda. La zona cobra una importancia cada vez mayor en la política de la UE. En los coloquios se abordaron cuestiones en materia de infraestructuras, energía, recursos hídricos, inmigración y lucha contra la desinformación. Preocupación por la situación en Afganistán. Críticas a la guerra rusa en Ucrania.
Moscú (AsiaNews) - Los ministros de Asuntos Exteriores de los países de Asia Central se reunieron hace unos días en Samarcanda (Uzbekistán) con representantes de la Unión Europea para hablar de las relaciones mutuas entre las dos grandes regiones del mundo en el plano político, económico, financiero, energético, ecológico y sociocultural. Por la parte europea, la delegación estuvo encabezada por el jefe de la diplomacia, Josep Borrell, quien declaró al final de la reunión que el papel de Asia Central es cada vez más importante en el escenario político y económico mundial.
Según Borrell, "hasta hace pocos años, cuando se hablaba de Asia Central, parecía que no estaba en ninguna parte, pero hoy está en todas partes"; se ha convertido en una de las regiones más "respetables" del mundo, "a medio camino entre Europa y Asia". Es cada vez más importante reforzar la red de infraestructuras en los países de esta zona, que ahora son indispensables para las relaciones entre los dos continentes: "Esto ya era cierto ayer, y mucho más hoy, a la luz de la guerra de Rusia contra Ucrania", afirmó Borrell.
Los ministros de Asuntos Exteriores de Europa y Asia Central ya se habían reunido hace un año en Dusambé (Tayikistán), antes de la guerra, pero el escenario mundial ha cambiado radicalmente desde entonces: "Desgraciadamente no en la mejor dirección", señaló Borrell, ya que todo el mundo se ve afectado por la agresión rusa. Destacó que hoy en día es más importante que nunca "preservar los lazos de colaboración, desarrollar el comercio, trabajar juntos para hacer frente al cambio climático y controlar el narcotráfico y el crimen organizado a nivel mundial".
La guerra de Rusia quebró todas las reglas del orden mundial, haciendo que el mundo entero sea mucho más peligroso, y la única manera de hacer frente a este desafío es mediante la colaboración activa, no los llamamientos formales. Borrell también abordó el tema tan delicado de la situación en Afganistán, que "ya no ocupa las primeras páginas de los periódicos, pero sigue siendo un problema sin resolver".
La negativa de los talibanes a llevar a cabo un proceso político inclusivo y a garantizar los derechos fundamentales de las mujeres, las niñas y las minorías étnicas arroja una luz siniestra sobre toda la región. Además, añadió el enviado de la UE, "crecen el terrorismo y el crimen organizado, cuya influencia sufren ustedes en sus propios países, por no mencionar el flujo ininterrumpido de refugiados afganos hacia los países vecinos”.
El político español recordó que la UE ha destinado más de 400 millones de euros al pueblo afgano en los últimos cuatro años: "Hemos hablado explícitamente de todos estos problemas, incluida la recuperación después de la pandemia y la situación climática, y esto nos anima a desarrollar cada vez más nuestras relaciones". La UE se ha comprometido a hacer todo lo posible para contribuir a la seguridad de las fronteras en Asia Central, en el marco del programa de cooperación europea en materia de administración de fronteras, que se desarrolla a largo plazo.
Los europeos también están dispuestos a apoyar a los países de la región en la lucha contra la desinformación, que a menudo provoca inestabilidad a nivel local. Borrell anunció una nueva conferencia de coordinación entre la UE y Asia Central, en la que se propondrán una serie de proyectos concretos en los ámbitos de recursos hídricos, energía, digitalización y transporte.
Al final de su intervención, el ministro de Asuntos Exteriores de la UE se alegró de la extensión del Acuerdo de Granos del Mar Negro, para la exportación segura de cereales procedentes de Ucrania. Un tema en el que también hizo hincapié el presidente turco Erdogan, al referirse a la prórroga del acuerdo por otros 120 días. "Los alimentos jamás deben utilizarse como arma en la guerra", concluyó Borrell, y agradeció "a la ONU y a Turquía por su cooperación en esta iniciativa".
11/11/2020 15:47
02/09/2021 09:48