La Sura de la Conquista de Santa Sofía reabre el enfrentamiento entre turcos y Grecia
En ocasión de los 567 años de la conquista otomana de Constantinopla, Erdogan avala una oración islámica en la basílica. Ira del gobierno griego, que habla de insulto a la comunidad internacional. La réplica de Ankara: surge en “territorio turco, es propiedad nuestra, sólo se trata de nosotros”. Católicos y ortodoxos favorables al “status quo”.
Estambul (AsiaNews/Agencias) - Las celebraciones por los 567 años de la conquista otomana de Constantinopla han reabierto el enfrentamiento entre Atenas y Ankara alrededor del destino de Santa Sofía en Estambul. En la vigilia de recurrencia, el presidente turco Recep Tayyip Erdogan había avalado la recitación de una oración islámica, la Sura de la conquista, dentro de la estructura nacida como basílica, transformada en mezquita y al final transformada en museo en 1935 bajo la directiva de Kemal Ataturk, padre de la Turquía moderna.
Erdogan, siguió en vídeo conferencia el evento que se realizó el 29 de mayo pasado, criticó al gobierno griego “que no tiene ni una mezquita en toda la capital”, Atenas. Para cargar la dosis intervino el director de las Comunicaciones de la oficina presidencial Fahrettin Altun, afirmando que pronto la catedral, hoy museo, será “pronto transformada” en lugar de culto musulmán . “San pacientes” dijo dirigiéndose a los ciudadanos, porque “juntos haremos d modo que esto sucede”.
Las declaraciones de los vértices d Ankara siguen la durísima toma de posición de Grecia, que había definido la recitación de la oración islámica un “inaceptable intento” de modificar el “Status” de Santa Sofía. Una elección , agrega la dirigencia griega, comparable a un “desaire a la sensibilidad de los cristianos de todo el mundo”.
“Esta acción- declara en una nota al ministerio de Exteriores de Atenas- es un insulto a la comunidad internacional” y demuestra el desinterés de Ankara hacia el derecho internacional y el patrimonio cultural de la UNESCO. Inmediata la contro-réplica turca por boca del ministro de Exteriores, Mevlut Cavusoglu, según el cual “Hagia Sophia está en territorio turco, y fue conquistada” y “lo que sucede en nuestro país y que se refiera a una propiedad nuestra es solo un problema nuestro”.
La controversia entre Grecia y Turquía estuvo en todas las primeras páginas de la prensa griega, en la cual la conquista de Constantinopla es vista como “una gracia en el mundo islámico” y “una ocupación del universo cristiano”. El presidente de la Sociedad greco-americana de Atenas lanzó una propuesta destinada a hacer discutir: la apertura del edificio al culto alternándose un mes a los cristianos y otro a los musulmanes. “Si Santa Sofía se abre de este modo-subraya-millones de cristianos irán a Estambul. Y ustedes ganarían en turismo”.
Católicos y ortodoxos prefieren que sea conservada como museo. Pero las miras del “sultán” Erdogan y su política a golpes de nacionalismo e islam llevan siempre más hacia la dirección de una transformación de la basílica en mezquita, a despecho de la huella laica de
“Mustafa Kemal”.