Kurdistán: ONG y partidos de la oposición convocan a una huelga contra las ejecuciones en Irán

Protesta por la condena a muerte que se ejecutó ayer de cuatro presos kurdos. Los activistas califican a la República Islámica como una "máquina de represión" que funciona "a pleno rendimiento" y con "métodos brutales". Mientras tanto, la Corte Suprema confirmó la ejecución de otros seis presos políticos.

Teherán (AsiaNews)- Siete organizaciones iraníes de defensa de los derechos humanos y un partido de la oposición convocaron hoy a una huelga general con abstención del trabajo en toda la provincia occidental de Kurdistán, en respuesta a la ejecución de cuatro prisioneros pertenecientes a la minoría. Las ejecuciones contra la población kurda de la zona "se han intensificado", afirman las ONG activistas en una nota conjunta, mientras "la maquinaria represiva de la República Islámica de Irán está funcionando a pleno rendimiento".

El gobierno iraní está "ejecutando a jóvenes con métodos brutales, reprimiendo al pueblo de Kurdistán y sofocando su búsqueda de libertad", sigue diciendo la declaración de los organizadores de la protesta general. El documento hace especialmente referencia a la ejecución de cuatro miembros del partido local Komala que se llevó a cabo ayer, como resultado de juicios manifiestamente injustos, y a la confirmación de la pena de muerte de otros seis presos políticos que hizo la Corte Suprema de Teherán.

El objetivo de la huelga general es llamar la atención nacional e internacional sobre la dramática situación de los derechos humanos en Kurdistán y un último intento de evitar que los ayatolás sigan recurriendo al verdugo. Por su parte Abdulla Mohtadi, secretario general del Partido Komala del Kurdistán iraní, convocó también a partir de hoy a una movilización general de la organización política. “Numerosos partidos, organizaciones civiles e instituciones de derechos humanos de Kurdistán observarán mañana un día de huelga y de movilización pública”, escribió el líder político en su perfil X (antes Twitter). “Esta iniciativa - añade - servirá como homenaje a nuestros camaradas caídos y como protesta colectiva contra la masacre”.

La semana pasada decenas de presas recluidas en la cárcel de Evin, en Teherán, también iniciaron una protesta contra la pena de muerte, entre ellas la premio Nobel de la Paz Narges Mohammadi. La huelga de hambre es al mismo tiempo un acto de desafío y resistencia a la República Islámica y el recurso cada vez más frecuente al verdugo, en relación con la ejecución de Mohammad Ghobadlou, un joven con problemas mentales que fue condenado en el marco de las protestas por Mahsa Amini, a lo que se suma la situación de cientos de otros presos condenados a muerte.

En los últimos años los movimientos internacionales y grupos de activistas han acusado reiteradamente al régimen de utilizar la pena de muerte como herramienta para reprimir cualquier forma de disidencia, como ocurrió en el caso de Amini o acusaciones (falsas) de "espionaje" proisraelí. En 2023 la ONG Iran Human Rights, con sede en Oslo, ha registrado un récord de 604 ejecuciones capitales, aunque los activistas de Hrana hablan de al menos 746 víctimas. En el año que acaba de comenzar el grupo noruego ya ha documentado más de 50 casos de prisioneros ejecutados. En el ranking de las naciones que más utilizan la pena de muerte, la República Islámica ocupa el segundo lugar, sólo por detrás de China -que desde hace tiempo ya no publica estadísticas oficiales sobre las ejecuciones- y recientemente se ha registrado una escalada de ejecuciones entre los miembros de la minoría kurda.