Kuala Lumpur, cincuenta mil personas protestan para obtener la dimisión del Premier Najib

Hace años que Najib Razak está en el centro de un escándalo. La “Ola amarilla” marcha, canta y discute para también obtener la liberación de María Chin Abdullah, presidente del Bersih. Fue arrestada en la vigilia de la marcha, acusada de extremismo.

Kuala Lumpur (AsiaNews)- El atormentado pero despreciativo Premier malayo, Najib Razak recibió un fuerte pedido por parte de decenas de miles de ciudadanos para que presente su renuncia por su presunta involucración en un escándalo por una apropiación indebida multimillonaria.

Vestidos con camisetas amarillas, el enorme grupo -unas cincuenta mil personas- a favor de la democracia, llamado “Bersith” (que en malayo significa “limpio”) marchó por las calles de la capital.

El sábado 19 de noviembre, la ruidosa “marcha de la ola amarilla”, de la sociedad civil vio centenares de banderas, pancartas y caricaturas que pedían a viva voz las renuncia de Najib, que en los últimos meses gobernó con mano férrea para permanecer en el poder.

El ex Premier malasio, Mahatir Mohamad, vehemente crítico de Najib, se unió a los manifestantes frente a las Twin Towers apenas llegó de Sudán.

Vestido con la camiseta amarilla del Besih, Mahatir, de 91 años, afirmó que “no somos más una democracia, somos conocidos como una “cleptocracia”. Es el momento de trabajar juntos para poner fin a este gobierno cruel”.

El vice-presidente del Bersih, Shahrul Aman Shaari, durante el discurso dirigido a la multitud reunida cerca de la mezquita nacional dijo: “¡Nosotros no estamos aquí para hacer caer al país! ¡No estamos aquí para derrocar al gobierno, estamos aquí para fortalecerlo!”.

En el Bersih participó también Fahmi Reza -documentalista, diseñador y artista callejero conocido por haber realizado una caricatura del rostro de Naiib representado como payaso-, y comunicó que “nuestro país está siendo gobernado por payasos y delincuentes”. “Por lo tanto, estoy aquí para protestar contra el gobierno”.

Unos días antes de la marcha, la policía malasia advirtió que la protesta era ilegal y que no dudarían en usar gases lacrimógenos y camiones hidrantes en caso de que la situación se degenerase.

De cualquier modo, la manifestación terminó hacia la noche sin incidentes desagradables.

Si bien casi siete mil policías estaban en servicio cerca de las zonas donde se desarrollaba la manifestación, la moral era muy alta entre los manifestantes, que realizaron activamente la protesta tocando tambores, entonando cantos, formando coros y escuchando discursos en favor de una Malasia “limpia” y del poder popular.

Najib es atacado también por el Wall Street Journal, desde que, el año pasado, desviara casi setecientos millones de dólares americanos del fondo de inversiones del 1Malasya Devolopment Berhard (1MDB) a la cuenta corriente personal del Premier.

Ulteriores problemas surgieron este año, cuando en julio las causas legales intentadas por el departamento de justicia de los EEUU han comunicado que unos 3,5 millardos de dólares fueron robados del 1MDB - creado por Najib- y que parte de esos fondos fueran transferidos a las cuentas corrientes del Malasyan Official 1, que los funcionarios estadounidenses y malasios declararon que el fondo es reconducible a Najib.

Najib, tratando de limitar las discusiones en torno al escándalo, tomo decisiones en relación a las críticas y despidió al vice primer ministro, remplazando al procurador general, suspendiendo los periódicos y bloqueando las redes sociales.

La presidente del Bersih, María Chin Abdullah -arrestada en la vigilia de la marcha- fue encarcelada según la ley contra las amenazas a la seguridad malasia (medidas especiales), o Sosma, según fue declarado por sus abogados el día sábado.

El Sosma fue introducido en 2012, para proteger al país de las amenazas de los extremistas.

Hoy, Zaid Ibrahim, ex ministro de la United Malays National Organisation (Umno), escribe en su blog: “María es una buena organizadora y no tiene miedo, inspira a los malasios a ser valientes. Fue a causa de su suceso que los cobardes la han encarcelado. Debemos hacer todo lo posible para apoyar su causa, porque también es la nuestra”. Luego respondió a aquellos que en su blog afirmaron que el Bersih no ha llevado a nada, diciendo que si realmente la manifestación no tuvo éxitos concretos, entonces no es necesario continuar teniendo a María detenida.