Kirguistán, Pakistán y Turquía: manifestantes agredidas en la fiesta de la mujer

En Bishkek la policía arrestó a activistas por haber violado la prohibición del encuentro. En Islamabad grupos de radicales han asaltado las barricadas y agredieron a los participantes, entre los cuales habían muchos hombres.

Islamabad (AsiaNews/Agencias) – En algunos países asiáticos con una mayoría musulmana las manifestaciones femeninas fueron asaltada por lo opositores, mientras todo el mundo ayer celebraba la fiesta de la mujer con manifestaciones alegres e iniciativas llenas de color. Sucedió en Kirguistán, Pakistán y Turquía. En algunos casos, fue la policía quien dispersó a la multitud con gases lacrimógenos. En otros, grupos de radicales islámicos armados de bastones y barras.

Ayer en todo el mundo salieron a las calles. Entre los temas denunciados, las violencias domésticas, los matrimonios infantiles, los “homicidios de honor” realizados para restablecer una presunta dignidad pisoteada. Entre aquellos exaltados, el derecho a la ecua retribución, las solidaridad femenina, la igualdad entre hombres y mujeres, el respeto y la escucha recíproca entre las parejas.

En Bishkek, capital de Kirguistán, algunos centenares de mujeres se reunieron para manifestar contra los abusos cometidos dentro de las paredes domésticas y la tradición del “rapto de las esposas”, un fenómeno difundido pero tácito. Las manifestantes fueron agredidas por un grupo de hombres enmascarados. La policía llegó al lugar cuando los asaltantes ya se habían dispersado. Los agentes en cambio arrestaron a 70 activistas, acusándolas de manifestar ilegalmente, dado que la prohibición de concentración impuesto para prevenir el coronavirus (si bien en el país no se registraron casos de contagio).

En Estambul (Turquía) la policía lanzó gases lacrimógenos para dispersar las pocas decenas de mujeres que manifestaban en una esquina d la plaza Taksim. Para impedir al grupo llegar a la zona peatonal de Istiklal Street, el gobernador Ali Yerlikaya decidió cerrar la parada del metro de la plaza y la vecina estación de Sishane. Al mismo tiempo la policía formó una cadena humana para bloquearles el paso. Según las autoridades, que ya en el pasado habían interrumpido por la fuerza varias manifestaciones femeninas; la zona no obtuvo el permiso de poder concentrarse.

En Pakistán, la jornada estuvo marcada por iniciativas pacíficas y otras terminaron en agresiones. En Faisalabad, en el barrio de Madina Town, se organizó un seminario para celebrar los logros de las mujeres y recordar las violaciones sufridas por ellas, como los secuestros y las conversiones forzadas al islam. En cambio en la capital, la marcha organizada por varias organizaciones capitaneadas por “Aurat Azadi March Islamabad” (marcha para la libertad de las mujeres), fue agredida por grupos islámicos. Las facciones radicales de Jamiat Ulema-e Islam (F), Sunni Ittehad y Jamia Hafsa infringieron las barricadas y agredieron a los manifestantes, entre los cuales muchos hombres, con bastones, piedras y zapatos. Diversas personas resultaron heridas.

(Se contó con la colaboración de Shafique Khokhar)