Kiev quiere ‘salvar’ a Tiflis (de Putin)

de Vladimir Rozanskij

Los ucranianos dictan sanciones contra los familiares del fundador del partido mayoritario de Georgia, por los presuntos vínculos con el líder ruso. Los georgianos no quieren ser arrastrados a la guerra. En Tiflis, la oposición se muestra cautelosa.

Moscú (AsiaNews) - Las decisiones y declaraciones de varias figuras políticas ucranianas provocaron un fuerte debate en Georgia. El presidente Volodymyr Zelensky aprobó una nueva lista de sanciones, que incluye a varios familiares cercanos del fundador del partido Sueño Georgiano, Bidzina Ivanišvili, visto como el verdadero "agente de Putin" en el Cáucaso.

Para echar más leña al fuego, el asesor del jefe de Estado ucraniano, Aleksej Arestovič (ver foto), prometió que "Ucrania salvará a Georgia". En Tiflis, los representantes del partido mayoritario repiten que Kiev pretende arrastrar a Georgia a una guerra contra Rusia.

El gobierno georgiano no ha dado señales de que haya solicitado oficialmente a Kiev una aclaración -ni diplomática ni de otro tipo- sobre las sanciones impuestas a los familiares de Ivanišvili. El líder de Sueño Georgiano, Iraklij Kobakhidze, sugirió "no dejarse llevar por las emociones", ya que Georgia mantiene una postura amistosa con Ucrania, a pesar de los reclamos ucranianos relacionados con los acontecimientos bélicos. El viceprimer ministro y ministro de Cultura, Teja Tsulukiani, también se pronunció al respecto, afirmando que "es muy lamentable que un país que dice ser amigo tome decisiones tan hostiles, pero Georgia no se dejará arrastrar a la guerra".

En declaraciones al canal de televisión Alfa y Omega, Arestovič cargó aún más las tintas, explicando que la situación en Georgia "es una catástrofe, teniendo en cuenta las posiciones de su gobierno prorruso, que es incapaz de tomar ninguna decisión". El actual ejecutivo de Tiflis, dice Arestovič, ha destruido todo lo que había creado el ex presidente Saakašvili (hoy detenido en una cárcel georgiana y en posesión de la ciudadanía ucraniana); ahora el país es víctima de la corrupción policial, donde todos se venden al mejor postor, "como dicen los propios georgianos".

Arestovič agregó que podía imaginarse "cómo se rasgan las vestiduras los georgianos que realmente aman su patria, pero haremos todo lo posible para salvarlos, y también queremos salvar a Moldavia y Armenia, para restaurar todo el espacio postsoviético". El asesor de Zelensky prevé un esfuerzo conjunto de reconstrucción tras la guerra, en el que se necesitarán "muchos pacificadores, operaciones de estabilización y ayuda humanitaria".

Lo cierto es que semejantes declaraciones dejaron bastante sorprendidos a los miembros de la oposición georgiana del Movimiento Nacional, el partido fundado por Saakašvili. Los anuncios "salvíficos" de Arestovič, como dijo el líder del grupo, Khatija Dekanoidze, aunque provocaron perplejidad, conllevan reconocer la "libertad de expresión" de todos. Admitió que no entiende "esas palabras de amenazas de guerra, y no comparto las opiniones de quien quiere actuar con la fuerza... Arestovič habla del papel de Ucrania en la región, pero embarcarnos en una nueva guerra con los rusos por nuestros territorios ocupados es algo que está fuera de discusión", dijo, en alusión a la situación en Abjasia y Osetia del Sur.

Según Dekanoidze, "los georgianos recurrirán exclusivamente a vías pacíficas, a través de la integración política y económica con Occidente, y esto incluye el objetivo de recuperar esos territorios ocupados". El diputado de Sueño Georgiano Iraklij Kadagišvili comentó las palabras de Arestovič en otro sentido: "En [su] lógica, primero deben entrar los ejércitos, luego los diplomáticos y finalmente los inversores, pero de esta manera lo que obtenemos son nuevos amos imperialistas; es exactamente lo que han hecho siempre los rusos”.

La mayoría del gobierno quiere evitar que se abra un conflicto con Ucrania, y con "Occidente que le cuida las espaldas", como confirma otra diputada de la oposición, Salome Samadašvili: "Las sanciones contra la familia de Ivanišvili son consecuencia de las malas decisiones de Georgia en materia de seguridad, y ahora Sueño Georgiano se queja del resultado de su inacción, haciendo propaganda contra los ucranianos para infundir miedo en la sociedad".

El jefe de la Comisión Parlamentaria de Relaciones Exteriores, Nikoloz Samkharadze, dijo que las cuestiones planteadas por Arestovič se abordarán en cualquier caso en una próxima reunión en Zagreb, donde se constituirá la plataforma de apoyo a Ucrania: "Entonces se pronunciarán discursos serios, no palabras al viento que no vale la pena escuchar".