Katmandú prohíbe a los tibetanos celebrar las insurrecciones por la independencia de China

de Christopher Sharma

El nuevo gobierno, guiado por el Congress, avisa a la comunidad: "Nada de protestas, ni siquiera pacíficas. De otro modo, serán arrestados". La insurrección de 1959 es un evento aún muy sentido por los tibetanos de todo el mundo: después de la represión inició la diáspora y el Dalai Lama escapó a India. Activista por los derechos humanos: "Esta no es una democracia".

Katmandú (AsiaNews)- El gobierno intimó a la comunidad tibetana residente en el País a no celebrar, ni siquiera en forma pacífica, la fallida insurrección anti-china del 10 de marzo de 1959. La fecha es muy importante para los tibetanos de todo el mundo, que recuerdan las insurrecciones populares contra la dominación del ejército maoísta. Esa protesta fue aplastada por el gobierno chino y obligó al Dalai Lama a dejar el País y refugiarse en India.

El nuevo gobierno nepalés, guiado por el presidente del Congress Shusil Koirala, emanó a todas las estaciones de policía un aviso que impone el arresto a los manifestantes y a la dispersión de cualquier forma de actividad hacha por los tibetanos residentes en Nepal. Ganesh KV, oficial de policía de Katmandú, confirma: "A continuación de las directivas del ejecutivo hemos dado el alerta. Los tibetanos no deben reunirse: tenemos órdenes de arrestar y utilizar otras acciones legales si alguno quisiese protestar contra China".

A continuación de la fallida insurrección anti-china, un gran número de tobetanos dejó el propio País para establecerse en India y en Nepal. Aquí viven casi 20 mil tibetanos, que el gobierno tiene bajo estricto control para evitar problemas con Beijing. Nepal y China han iniciado de hace un decenio un recorrido de acercamiento económico, político y diplomático: Katmandú teme perder los ricos negociados con las empresas chinas y por lo tanto trata en cualquier modo evitar tensiones.

El nuevo gobierno tenía acceso a las esperanzas de la comunidad tibetana, pero esta directiva confirmó que todo permanece como está. Gyalbo lama, activista por los derechos de los tibetanos en Nepal, dice: "El partido del Congress dice ser democrático, pero no está en grado de garantizar los valores democráticos y el derecho a la protesta pacífica de sus ciudadanos. Tenemos el derecho de reunirnos, si no cometemos reatos, y deberíamos ser libres de rezar donde queramos. En cambio, los agentes del gobierno nos siguen y violan nuestros derechos, también cuando rezamos. Esta no puede ser democracia".