Kandhamal: de la persecución a la fraternidad con sor Sanomina
En un pueblo de Orissa, en 2008, la única familia católica se vio obligada a huir durante la persecución, perdiéndolo todo. Ahora, la niña de aquel momento ha hecho su primera profesión religiosa y los hindúes que habían sido parte de la violencia también participaron en la celebración de los cristianos. Un rayo de luz mientras la Iglesia de la India vive días de nueva angustia por la situación de los cristianos en el Estado de Manipur.
Kandhamal (AsiaNews) - Son semanas de nueva angustia en India por la grave situación que está afectando a las comunidades cristianas del estado de Manipur, gravemente envueltas por las muertes y la destrucción de sus iglesias en los enfrentamientos étnicos entre los meitei y los grupos tribales locales. En una conferencia de prensa en Ginebra, el mismo Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Volker Türk, expresó su profunda preocupación por la escalada de las tensiones y pidió a las autoridades indias que respondan rápidamente a la situación. Türk subrayó la importancia de investigar y abordar las causas profundas de la violencia, respetando las obligaciones internacionales respecto a los derechos humanos.
Mientras tanto, continúa la movilización de la comunidad católica india en favor de los miles de desplazados a los que la arquidiócesis de Imphal está ofreciendo ayuda de emergencia. El card. Anthony Poola, arzobispo de Hyderabad, envió un mensaje a todas las parroquias invitándolas a realizar una colecta extraordinaria este domingo en favor de los hermanos de Manipur. En el texto, el card. Poola pidió que continúen rezando para que terminen la violencia y los disturbios.
Lo que está sucediendo en estas semanas en Manipur recuerda otras páginas dolorosas de la historia reciente de las comunidades cristianas de la India. Y precisamente desde el distrito de Kandhamal, que en 2008 sufrió la peor ola de persecución, nos ha llegado en estos días una historia de enorme fe y esperanza más allá de la tribulación que queremos ofrecer como un rayo de luz en estos difíciles momentos.
Cuando era niña y vivía con su familia en Orissa, se vio obligada a abandonar la aldea por la violencia durante la persecución de 2008. Eran la única familia cristiana de esa comunidad del distrito de Kandhamal. Ahora, quince años después, Sanomina ha dado el primer paso para convertirse en monja. A la celebración en su honor asistieron también hindúes del pueblo.
Sor Sanomina Kanhar, hija única de Kumar y Lourd Kanhar, hizo su primera profesión en las Hermanas de Nuestra Señora de Fátima de Bangalore. Pertenece a la aldea de Sadingia, en la parroquia de Pobingia, distrito de Kandhamal. La suya es la única familia católica del pueblo, mientras que 54 familias son hindúes.
El p. Madan Singh, director de Jana Vikas, un centro de servicios sociales del distrito de Kandhamal, contó a AsiaNews esta historia: "Durante los episodios de violencia de agosto de 2008, el señor Kumar fue brutalmente golpeado. En aquella época, la hermana Salomina tenía cinco años. Cuando la gente los atacó, destrozaron su casa, dañaron la propiedad y se llevaron 7 cabras, 5 ovejas y 4 vacas. Quisieron obligar a Kumar a renegar de Jesús, pero les dijo: 'No renegaré de mi Señor, que me dio la vida y la fe, estoy dispuesto incluso a morir'. Lo obligaron a marcharse del pueblo, dejándolo todo y llevándose a su mujer y a sus tres hijos. Su familia fue al campo de socorro de Janla, dirigido por las monjas de la Madre Teresa en Bhubaneswar. Aquella experiencia le rompió el corazón. Incluso cuando regresó al pueblo, lo amenazaron con matarlo si practicaba el cristianismo. Pero perseveró en su fe, volvió a cultivar la tierra y reconstruyó su casa".
Para ayudar a sus hijos, Kumar había recurrido al padre Manoj Nayak cuando estaban en el Jana Vikas. Y fue con él con quien Salomina descubrió su vocación a la vida religiosa. "Cuando le pregunté a su padre por qué había aceptado", contó el padre Madan Singh, "me contestó: 'Dios me ha dado una hija única y yo la he entregado a la obra de Dios'. Pero lo más interesante es que las mismas personas que persiguieron a su familia, hoy recibieron a Sor Salomina en su casa desde la entrada del pueblo con bailes y música tradicionales. También ayudaron a cocinar la comida para los invitados y familiares. El párroco, el padre Cassian Pradhan, organizó la ceremonia, a la que asistieron nueve sacerdotes y cuatro religiosas y más de 400 cristianos de los pueblos vecinos. Fue un testimonio de fe y un signo de unidad y fraternidad".
29/08/2020 11:22
27/12/2022 14:11