Juegos Olímpicos: Manila celebra las dos medallas de oro de Carlos Yulo en gimnasia

de Santosh Digal

Es un logro histórico para Filipinas después de la primera medalla de oro de la levantadora de pesas Hidilyn Diaz en la edición anterior de los Juegos. Los obispos locales elogiaron la disciplina, la determinación y la devoción del atleta de 24 años, que entrenó durante mucho tiempo en Japón.

Manila (AsiaNews)- También los obispos de Filipinas elogiaron el talento, la perseverancia y la fe de Carlos Edriel Poquiz Yulo, el gimnasta de 24 años que ganó dos medallas de oro en suelo y salto los días 3 y 4 de agosto en los Juegos Olímpicos de París. . "Las cosas buenas llegan a los que esperan, pero es fundamental actuar y mantener la determinación. La perseverancia es una cualidad poderosa que nos empuja hacia nuestros objetivos", declaró Mons. Ruperto Cruz Santos, vicepresidente de la Comisión Episcopal para la Pastoral de los Migrantes e itinerantes (ECMI) de la Conferencia Episcopal de Filipinas (CBCP).

Dos medallas de oro en una misma edición de los Juegos (el primer atleta filipino en lograr ese resultado) que se conquistaron gracias a la disciplina, la determinación y la devoción, comentó el prelado. “Tú, Carlos, has inspirado no sólo a una generación de atletas, sino también a personas de todas las edades, y dejas un legado para Filipinas. Tus logros seguirán motivando e inspirando a otros para alcanzar sus sueños”, continuó Mons. Santos. “Al igual que Carlos, conocido por ser un devoto creyente en Cristo, podemos encontrar la fuerza en nuestra fe en Cristo, rindiendo honor y alabanza a Dios por guiarnos y protegernos en nuestro camino”, agregó. "Realmente has traído un inmenso orgullo a nuestro país, Carlos. Continúa brillando y que tu éxito siga elevando a Filipinas".

Mons. José Colin Bagaforo, presidente de Cáritas Filipinas, celebró el triunfo olímpico de Yulo junto con todo el país. "Cáritas Filipinas extiende sus más sinceras felicitaciones a Carlos Edriel Yulo por su extraordinario logro en los Juegos Olímpicos", dijo Mons. Bagaforo. "Tu camino, marcado por desafíos y triunfos, es un testimonio del espíritu inquebrantable del pueblo filipino. Tu victoria no es sólo tuya, sino que es un triunfo compartido por toda la nación", afirmó el prelado. "Que tu éxito siga inspirando y elevando las vidas de innumerables filipinos, especialmente de los sectores marginados y desfavorecidos de la sociedad", añadió.

El padre Daniel Franklin Pilario, presidente de la Universidad Adamson, fundada por los vicencianos, donde Yulo completó sus estudios universitarios, lo felicitó por conquistar dos medallas de oro. El presidente Ferdinand Marcos Jr. también felicitó a Yulo en una publicación en las redes sociales por su actuación en los Juegos Olímpicos.

La primera participación de Filipinas en los Juegos Olímpicos fue hace 100 años. Y Yulo es el segundo filipino que gana una medalla de oro para Filipinas, tras la que conquistó Hidilyn Diaz en levantamiento de pesas en los Juegos de Tokio.

Carlos Yulo creció en Filipinas y en 2016, siendo todavía adolescente, abandonó el país para entrenar en Japón con Munehiro Kugimiya, de quien se separó el año pasado por diferencias personales. Quedó sin entrenador cinco meses antes de los Juegos Olímpicos y viajó primero a Corea del Sur y luego al Reino Unido para entrenar con atletas internacionales que luego fueron sus adversarios en París.

El gobierno filipino y algunas grandes marcas han decidido recompensar a Yulo con casas, departamentos y premios en efectivo, pero incluso las empresas más pequeñas han querido regalar sus productos al deportista: un especialista en iluminación para automóviles le ofreció un juego gratuito de faros delanteros y antiniebla, otras empresas han prometido suministros de por vida de fundas para teléfonos y macarrones con queso, solo por nombrar algunos. Para celebrar el logro histórico, en los últimos días algunos bares y restaurantes filipinos también ofrecieron comidas o batidos gratuitos a cualquier persona llamada Carlos, Caloy (su apodo) o Edriel (su segundo nombre).