Java Oriental: escuela musulmana (moderada) castiga con latigazos a tres estudiantes atrapados borrachos

de Mathias Hariyadi

El incidente tuvo lugar en una institución de Jombang vinculada a Nahdlatul Ulama, el mayor movimiento musulmán moderado. El director habla de un fuerte castigo para un "delito grave". Los jóvenes podían "elegir" entre la expulsión, la flagelación o permanecer tres días atados a un árbol. Preocupación por el Ministerio de Asuntos Religiosos, que pide "métodos no violentos".

Yakarta (Agencia Fides) - Los musulmanes moderados y la sociedad civil manifestaron desconcierto por la difusión de un video sobre Youtube, donde se ve tres jóvenes estudiantes de una escuela islámica en Jombang, provincia de Java Oriental, azotados 35 veces de manera brutal por su profesor. Con la excepción de Aceh, donde impera la ley islámica, la utilización de un método de este tipo de castigo no es una práctica común en las diferentes provincias de Indonesia. La dirección del instituto explicó que los chicos habrían sido capturados borrachos en el edificio, después de consumir grandes cantidades de alcohol (prohibido en el Islam).

Otro motivo de consternación, el hecho de que justamente Jombang y, en general, la zona de East Java es sede en realidad de la organización musulmana moderada más importante, el Nahdlatul Ulama (NU). Entre los ciudadanos ilustres de Jombang está también el ex presidente Abdurrahman "Gus Dur" Wahid, un icono de la lucha por la integración entre diferentes religiones y la armonía interreligiosa en Indonesia, así como miembro de primer plano en la historia del Nu. Para causar aún más confusión, el hecho de que la escuela en la cual ha ocurrido esa violencia es conducida por un líder religioso musulmán que pertenece justamente a Nahdlatul Ulama.

El jefe de pesantrem - la escuela islámica - Kiai Hajj Mohammad Qoyim confirma sin dudar la historia, señalando que "la flagelación (en la foto) se practica sólo por delitos graves". Añade que los tres estudiantes fueron golpeados con un palo afilado con el consentimiento de sus padres. Los chicos podían salir de la escuela, concluye, pero han decidido quedarse y afrontar el castigo: el remordimiento y la flagelación.

Entre los castigos "alternativos" que ofrece la escuela, estar atado durante tres días en la rama de un árbol, pero ellos prefirieron ser azotados porque "sería una solución más rápida". Un castigo "por amor", porque violaron "gravemente las normas de la institución".

En el pasado, otra estudiante habría sido castigada con mil latigazos, por un caso de adulterio.

Interrogado al respecto, el Ministro de Indonesia (el país musulmán más poblado del mundo) para los Asuntos Religiosos Lukman Hakim Saifuddin expresa su preocupación y espera que este tipo de castigos severos ya no se practiquen. Para educar a los jóvenes, añade, sirven "métodos no violentos".