Java Central: matrimonio gay sorpresivo no es legalizado

de Mathias Hariyadi

Ratu Airin Karla y Dumani, dos hombres, invitaron a parientes y amigos a una fiesta de “agradecimiento” por su larga amistad. Los participantes se encontraron, en cambio, con lo que se dice una verdadera fiesta de matrimonio, celebrada de acuerdo a la tradición javanesa. La unión no fue reconocida por el gobierno, porque carece de la necesaria bendición de la autoridad religiosa.

Yakarta (AsiaNews) – Por primera vez, dos hombres homosexuales indonesios celebraron su matrimonio en público, disfrazándolo como una ceremonia de “agradecimiento” por su larga amistad. La celebración, ocurrida en la aldea de Cluntang, provincia de Boyolali (Java Central), se desarrolló de acuerdo a los cánones del lugar, con ambos esposos ataviados según la tradición nupcial javanesa, un gran número de invitados y un banquete. En los días precedentes, como es costumbre en Indonesia, los esposos enviaron tarjetas de invitación a parientes y amigos, pidiendo su “bendición”. El matrimonio aún no fue registrado legalmente. En Indonesia, de hecho, la legalización de una unión (entre un hombre y una mujer) puede ser otorgada solamente por una autoridad religiosa, y luego ésta es registrada en la dependencia local del Registro Civil.

Uno de los “esposos”, Ratu Airin Karla, es conocido por la comunidad local desde que era un niño. Durante el sexto año de la escuela primaria (11-12 años) cambió totalmente de comportamiento y “desde aquél día comenzó a usar sólo vestimenta femenina”, cuenta un habitantes de la aldea. No obstante ello, Karla siempre socializó con amigos y con los habitantes del lugar. Durante el "matrimonio" vistió el traje tradicional de esposa.

Los familiares y participantes en la celebración quedaron "shockeados" al descubrir que la fiesta de "agradecimiento" era, en realidad, un verdadero matrimonio. La comunidad local expresó su desencanto y no reconoció la unión. El jefe de la aldea, Suryati, declaró que la pareja no había enviado ninguna carta de solicitud a las autoridades para poder celebrar el matrimonio. De acuerdo a la ley indonesia, el gobierno debe primero verificar que los esposos no tengan "otros compañeros" o bien "serios obstáculos" para contraer la unión. Suryati afirmó que jamás hubiera dado el permiso a Karla y a Dumani (el "esposo"), y siendo que su relación es "anormal", la ceremonia nupcia ilegal está contra las enseñanzas religiosas islámicas.

En septiembre pasado, otra unión entre personas del mismo sexo (un hombre de Bali y un turista americano) fue celebrada en Ubud, el destino turístico más famoso de la isla, desencadenando una reacción de rechazo de parte de la sociedad civil.
El año pasado la Universidad católica Sanata Dharma tuvo que cancelar una seminario dedicado a las orientaciones sexuales “diversas”, luego de haber recibido amenazas de parte de extremistas islámicos.