Jaffna, el presidente Sirisena entrega 100 viviendas nuevas a los desplazados por la guerra civil, después de casi 20 años
El complejo habitacional se levanta en un terreno de 47 acres en Keeramalai. Cada vivienda tiene 50 metros cuadrados. La iniciativa surgió a partir de una visita efectuada por el presidente poco después de ser electo.
Colombo (AsiaNews) – El presidente de Sri Lanka, Maithripala Sirisena, entregó 100 nuevas viviendas a los desplazados internos que hasta ahora vivían en los campos de refugiados situados en el norte de la isla. Las casas fueron construidas en tiempo récord (cuatro meses) en Keeramalai, en la península de Jaffna. Algunos beneficiarios afirman a AsiaNews: “Finalmente podemos vivir en paz. Agradecemos a nuestro presidente por este complejo habitacional”.
La iniciativa del presidente – que anteriormente ya había restituido tierras expropiadas a sus legítimos propietarios tamiles, a quienes les fueron arrebatadas durante la guerra civil que durante casi 30 años ensangrentó al país – nació a partir de una visita efectuada al campo de Konartpulam, en Telippali, ciudad de Kankasenthurai, poco tiempo luego de ser electo. Allí se reunió con los desplazados y quedó en estado de shock por el hecho de que algunos vivían en tiendas desde hace más de 20 años.
Luego de esa visita, dio orden al ministerio de Defensa para construir las viviendas y clausurar el campo de refugiados a la mayor brevedad posible. Las viviendas, que fueron inauguradas el 31 de octubre con una ceremonia solemne, fueron construidas por el ejército, por los ex rebeldes de los Tigres tamiles y beneficiarios.
Las llaves fueron entregadas a los nuevos locatarios, que no pudieron esconder la emoción. Uno de ellos, Rasamani Sivaneshwaram, de 46 años, transcurrió la mitad de su vida en las tiendas. “Estamos agradecidos al presidente –afirma- esto significa mucho para mí y para mi familia. Tenemos la seguridad de una casa, en la cual poder dormir”.
El Keeramalai Housing Project se levanta sobre un terreno de 47 acres, adyacente a un campo del ejército, en Palaly. Varias divisiones de militares han trabajado día y noche para la construcción del complejo, a fin de permitir la entrega rápidamente. Cada vivienda tiene 50 metros cuadrados de superficie y está formada por dos dormitorios, una sala de estar, cocina con comedor y un baño. El complejo también abarca un centro para las reuniones de la comunidad, un mercado, una comisaría, un área de juegos y un jardín maternal.