Israel, escuelas cristianas: para el gobierno una excelencia, que hay que castigar cortando los fondos
El p. Abdel-Masih Fahim confirma que el gobierno israelí no distanció aún los fondos bloqueados desde 2015. Por un lado el ministerio elogia a las escuelas cristianas, entre las mejores del país y por el otro trata de limitar la actividad. El entusiasmo de los estudiantes, el espíritu multicultural y multi-confesional más fuerte de los obstáculos. “No somos simples espectadores más fuertes de los obstáculos. “No somos simples espectadores, sino actores”.
Jerusalén (AsiaNews)- Estudiantes y docentes han iniciado el nuevo años escolástico “con entusiasmo y participación”, también si quedan “irresueltos” los problemas que de hace más de un año condicionan la vida de las escuelas cristianas en Israel. Es cuánto cuenta a AsiaNews, el p. Abdel-Massih Fahim, sacerdote franciscano y director de la Oficina de las escuelas cristianas de la Custodia de Tierra Santa, el cual confirma que “la situación a nivel financiero está todavía suspendida y las cuentas empeoran”. “El ministerio-agrega- todavía no destinó los fondos prometidos en 2015. Pero, nosotros queremos continuar nuestra misión, por esto hemos iniciado las clases”.
En estos días volvieron a los bancos de las escuelas los 33 mil estudiantes de las escuelas cristianas, entre antiguos problemas y nuevos desafíos en ámbito educativo y social. La primera campana sonó en todos los 47 institutos; este año, a diferencia del pasado, las lecciones han iniciado con regularidad, si bien queda abierta la controversia que, en septiembre 2015, llevó a los vértices de la Iglesia de Tierra Santa-junto a estudiantes y padres- a postergar de casi un mes el inicio de las lecciones.
En 28 días, tanto duró la huelga, alumnos y docentes de hecho han denunciado el régimen discriminatorio realizado por Israel hacia las escuelas cristianas. Entre las razones de la protesta la disminución progresiva de las financiaciones y la imposición de un techo en las cuotas escolásticas que los institutos podían pedir a las familias. El tira y afloja continuó por mucho tiempo y se concluyó con la promesa del gobierno de destinar 50 millones de shekel (poco menos de 12 millones de euros). Una suma que se debía consignar dentro del 31 de marzo de 2016 pero que, hasta hoy, resulta que aún no llegó.
La batalla contra el corte de los fondos vio involucrado también a los vértices de la Iglesia de Tierra Santa y de los obispos europeos. El tema de las escuelas fue uno de los puntos clave al centro del encuentro entre el Papa Francisco y el presidente Reuven Rivlin, en su primera visita al Vaticano.
“Hemos negociado con el ministerio de Instrucción y con el ministerio de la Igualdad social- cuenta el p. Abdel-Massih Fahim-pero la cuestión queda aún en suspensión. En los días pasados nos han pedido llenar un funcionario, que hay que enviar antes del 20 de septiembre, para recibir una parte (el 255 del total que se espera, ndr) de las financiaciones. Ya hemos proveído en completarlos, ahora estamos en la espera y veremos qué sucede.
Las escuelas cristianas cuentas con 400 años de historia y la voluntad de la dirigencia de la Iglesia es de mantenerlas abiertas. “Ya en el pasado hubieron momentos de crisis-prosigue el sacerdote-y nosotros estamos convencidos de poder superar también esta. Nosotros queremos continuar, a despecho de la situación de crisis financiera, tanto que el año pasado hemos hecho un ulterior descuento del 255 a las familias”.
En previsión del inicio del año escolar, cada instituto “se arregló” para garantizar la cobertura financiera necesaria pero “es una solución momentánea”. “Nosotros no queremos la limosna del gobierno-agrega el p. Fahim-sino el respeto de nuestros derechos”. Los vértices ministeriales han propuesto una cobertura financiera del 34% pero no es suficiente, además según la ley, deberían destinar fondos pares “al menos al 75% de los gastos”. La idea, agrega es de “hacernos perder nuestra autonomía, mientras nosotros continuamos defendiéndola a toda costa”.
La misión de las escuelas cristianas es “clara: educación igual para todos, en un contexto de diálogo, de confrontación y de intercambio entre estudiantes y docentes. Los problemas económicos con las autoridades israelíes no influyen y no deben influir con este objetivo. Y con el elemento multicultural y el pluralismo religioso que están en la base de nuestras realidades”.
El ministerio de Instrucción que por un lado no separa los fondos para las escuelas, por otro lado reconoce que los institutos cristianos representan una excelencia dentro del panorama educativo. “Entre las primeras realidades del país-confirma el director de la Oficina de las escuelas cristianas- están nuestros institutos, un reconocimiento no sólo local sino también a nivel internacional. A confirmación de esto, el hecho que hayan más pedidos respecto a nuestras disponibilidades. Ciertamente, nos desagrada decir que no a algunas familias, pero esto atestigua el buen trabajo hecho por nuestras escuelas”.
El nuevo año, de hace poco iniciado, se presenta por lo tanto rico de desafíos, no sólo de naturaleza económica: “El rol de las escuelas-concluye el p- Fahim-es el de aumentar la conciencia de los estudiantes adecuándolos para la investigación y a los veloces cambios en general y del Oriente Medio en particular. No somos simples espectadores sino actores, participamos en el crecimiento de nuestros estudiantes educándolos hacia los valores morales”.
Hasta hoy en Israel hay 47 escuelas cristianas, que garantizan instrucción a más de 33 mil niños, el 60% de los cuales cerca el 40% son musulmanes y una pequeña representación hebrea. También entre los docentes (unos tres mil) y el personal no docente no hay sólo cristianos, sino también musulmanes y hebreos. La discriminación obrada por el gobierno de Israel es un dato de hecho evidente, si se compara a cuanto sucede con las escuelas hebreas ultra-ortodoxas: ellas son subvencionadas en totalidad por el gobierno y no sufren inspecciones de parte del ministerio de Educación, si bien no estén en regla con el “curriculum” de los estudios.
